Más de 2 millones de niños necesitan “ayuda humanitaria” en Níger, país desestabilizado por un reciente golpe de Estado y minado por la violencia yihadista, afirmó hoy el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).

“Más de dos millones de niños se vieron afectados por la crisis y necesitan desesperadamente ayuda humanitaria” en el país del oeste de África, sacudido el mes pasado por un golpe de Estado, indicó la organización en un comunicado.

Antes de la reciente inestabilidad en Níger, Unicef estimaba que, en lo que va de 2023, 1,5 millones de niños menores de 5 años sufrían desnutrición, de los cuales al menos 430.000 padecen la forma más mortal de esa enfermedad.

  • Estas cifras podrían crecer “si los precios de los alimentos siguen aumentando y si una recesión económica golpea a las familias, los hogares y los ingresos” en Níger, advirtió Unicef.

Además, la “escasez de electricidad“, frecuente en Níger pero agravada por las sanciones que por el golpe de Estado le impuso la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (Cedeao), afecta la cadena del frío y puede comprometer la eficacia de las “vacunas infantiles” en los establecimientos sanitarios, agregó el comunicado.

La organización de la ONU dijo que lanzaba un “llamado urgente” a los “actores” de la crisis para garantizar el acceso de sus suministros vitales, bloqueados en diferentes puntos de entrada al país, y de trabajadores humanitarios, informó la agencia de noticias AFP.

También pidió a “los organismos que protejan los fondos humanitarios y las sanciones multilaterales o unilaterales”.

Níger es uno de los países más pobres del mundo y depende económica y energéticamente de países extranjeros.