Joseph Stiglitz se refirió a las “falsas narrativas” y defendió las medidas de aislamiento al señalar que “es la pandemia la causa de la debilidad económica y no las medidas restrictivas” en lo que se interpretó como un aval a la extensa cuarentena dispuesta por el gobierno argentino.

“Lo que causó una economía pobre es la pandemia y hasta que la pandemia no cese, no se acaba, esa es la realidad”, aseveró Stiglitz. Defendió el rol del Estado, el control en el movimiento de los capitales y sostuvo que habría que desalentar el endeudamiento de las empresas en monedas duras.

También, sugirió que sería bueno que los países desarrollados “donen o presten” sus Derechos Especiales de Giro retenidos en el FMI para ayudar a la recuperación económica que afirmó, en esta oportunidad no vendrá de la mano de China como sí ocurrió después de la crisis financiera del 2009.

Estas declaraciones fueron en efectuadas por el premio nobel de Economía en al marco de las “Jornadas Monetarias y Bancarias 2020”organizadas por el Banco Central.

El mensaje de Stigltiz fue grabado antes de las elecciones de los Estados Unidos y a lo largo de su alocución fue muy crítico de la gestión de Donald Trump. Al respecto, manifestó su esperanza de que la situación cambie con la llegada de Joseph Bidena la presidencia de los Estados Unidos.

“Mucho se puede hacer para aliviar los efectos del aislamiento pero se requieren inversiones” afirmó Stiglitz pero planteó que el problema es que “no hay voluntad” de los gobiernos a llevar a cabo estas inversiones, particularmente en políticas sociales para atender a los más débiles,

La pandemia del coronavirus reveló “profundas fallas en el sistema económico social de algunos países y fortaleza en otros”. En tal sentido ponderó favorablemente las políticas llevadas adelante por países como Nueva Zelandia y Corea del Sur.

Por el contrario, cuestionó las políticas llevadas adelante por la administración Trump. Puso como ejemplo que “las corporaciones no pagaran licencias por enfermedad” lo que obligó a que la gente fuera a trabajar “propagando la enfermedad”, en una decisión que consideró “inconcebible”. Recordó que los Estados Unidos tiene la menor esperanza de vida entre los países avanzados y el mayor nivel de desigualdad.

“”La magnitud de la retracción económica resultó peor de lo que inicialmente pensamos, y con un impacto enorme en los países emergentes”, dijo Stiglitz. Recordó que inicialmente se esperaba que la pandemia durase de “6 a 10 semanas” a pesar de que los trabajos de los epidemiólogos señalaban el riesgo de un problema más prolongado.

Los países que apostaron a la ciencia fueron los ganadores, dijo el economista “”Es una lección para el presidente (Donald) Trump, que cada año de su mandato propuso recortes en ciencia. Y como no prestó atención a la ciencia, el impacto en los Estados Unidos fue de más de 200.000 muertes y se esperan unas 200.000 más, fue un desastre”, aseveró.

Reitero que los países que mejor pudieron afrontar la pandemia fueron los que tuvieron las instituciones fuertes y respeto por el conocimiento. Por el contrario, crítico que “países como los Estaos Unidos y Reino Unido se pasaron 40 años denigrando al rol del Estado y eso imposibilitó al Estado responder de manera efectiva”, conceptos con los que coinciden el gobierno argentino.

Específicamente criticó que los senadores republicanos se nieguen a extender beneficios a los trabajadores “pese a que la nómina de desempleo continúa en ascenso en casi un millón de personas por semana”, puntualizó el premio Nobel de Economía. Recordó que los republicanos no tuvieron problemas asumir un mayor déficit fiscal cuando se trató de recortar impuestos para los más ricos y para las corporaciones.

Por Liliana Franco-amfin