Una parte del acantilado de la playa de Pipa, en Río Grande do Norte, colapsó. La mamá intentó proteger a su bebé y falleció abrazándolo.
El derrumbe del acantilado de Pipa, una famosa playa de Río Grande do Norte, en Brasil, sucedió de forma inesperada. Una joven familia, junto a su perro, descansaban a la sombra cuando todo colapsó, quedaron bajo los escombros del derrumbe, que les provocó heridas fatales y murieron.
Desabamento de falésia mata três pessoas na praia de Pipa, Rio Grande do Nortehttps://t.co/fmm8wI8aKe pic.twitter.com/m4XsmVeIYZ
— Estado de Minas (@em_com) November 17, 2020
Stella Souza, de 33 años y Hugo Pereira, de 32, el papá de su bebé de 7 meses, fueron a disfrutar de su día no laboral a la playa de Pipa. A pesar de las advertencias sobre los riesgos del acantilado, permanecieron bajo la sombra y ocurrió el terrible desenlace.
Testigos se precipitaron para tratar de salvar a la familia. Al remover las rocas hallaron al cuerpo de la madre abrazada al bebé en un intento de protegerlo de la caída. La criatura seguía con vida, pero no resistió a sus heridas.
“Excavamos hasta que encontramos al padre, y luego encontramos a la madre y al niño. El bebé todavía respiraba. Por casualidad, un médico pasaba por aquí en ese momento. Intentó revivir al nene, pero ya no pudo hacerlo”, declaró el empresario naútico Igor Caetano, testigo del accidente, al sitio G1.