En las últimas horas, trabajadores de taxis y remises solicitaron al Concejo Deliberante una suba de tarifas del 30% “debido a circunstancias de público conocimiento”. El sector aún se actualiza a las operaciones a través de billeteras virtuales para facilitar el pago del servicio, a la vez que para evitar manejar efectivo y prevenir ser víctimas del delito. Sin embargo, el año comenzó con tres robos a taxis en distintos horarios y en diferentes puntos de la ciudad. La calle no da tregua. 

Sin tiempo para relajarse, los aumentos siguen llegando. El incremento del 27% de naftas con el que comenzó el 2024 ya se distribuye en el resto de los precios. En tal escenario, referentes de trabajadores de taxis y remises ingresaron una nota al Concejo Deliberante con un pedido de suba tarifaria del 30%.

“Somos conscientes de la situación económica actual y no deseamos sobrecargar a la sociedad con gastos adicionales”, indicaron a través del escrito firmado por la Federación Nacional de Conductores, Ampat, Taxi Coop y Sociedad de Conductores de Taxis. El estudio de costos propio arrojó una actualización del 50%, pero se muestran dispuestos a renovar los valores con un diferencial del 20%.

De aprobarse, durante el día la ficha pasará de $50 a $65, mientras que la bajada de bandeja pasaría de $750 a $975. Con el diferencial nocturno del servicio que se aplica a los viajes entre las 22 y las 6, la ficha sería de $78 y la bajada de bandera de $1.170.

Inseguridad

“Tuvimos tres hechos en la misma noche”, contó a Mdpya Pablo Sánchez, referente de la Sociedad de Conductores de Taxis. “Tuvimos una en el sector del puerto. Después, otra en la zona de San Lorenzo y 190, y otra en Calabria y Vidal. En los tres casos, se robaron las pertenencias, la billetera y el celular de los choferes”, detalló.

Tras la extensa y ya saldada polémica por la instalación de botones antipánico y de GPS, aún los conductores encuentran falencias en el servicio: “En algunos llegó la policía, en otros no. Llegan más rápido los compañeros que los móviles policiales. Así que eso también causa enojo y fastidio”, señaló Sánchez.

Los tres robos se dieron en el transcurso de cinco horas. Si bien se vivieron momentos de angustia y enojo, “por suerte no fueron golpeados”, rescató el referente del sector.