Martin Azevedo es otra de las víctimas que sufrió el ataque de una jauría en la bicisenda de Santa Clara. Afirmó que el perro que lo tiró de la bicicleta tenía collar. “Nadie se hace cargo acá: ni los dueños de los perros ni el Municipio”, denunció.
La víctima fue Martin Azevedo, quien todavía padece las consecuencias de la embestida de los canes sueltos: por estos días atraviesa un proceso de recuperación después de que le tuvieran que reconstruir la clavícula en una operación a la que debió someterse en Buenos Aires.
“La Municipalidad dice que hace pero no se ve que haga nada. El problema viene de hace rato, hay perros sueltos por todos lados, y la única solución pasa por educar a los dueños de la animales y que la Municipalidad haga lo que tiene que hacer y cuide a sus ciudadanos”, concluyó.
El ataque de Azevedo ocurrió el 17 de julio y sorprendió al hombre de 40 años, acostumbrado a practicar ciclismo de ruta. “Jamás me había pasado algo tan grave. Ya había tenido una experiencia similar en el Bosque Peralta Ramos pero aquella vez el perro solo llegó a morderme la zapatilla”, recordó.
“Como ya había vivido eso y frené por miedo, cuando me pasó lo de la bicisenda decidí hacer lo contrario y aceleré pero al final los perros me tiraron y me provocaron esta quebradura”, comentó el joven, en diálogo con 0223, al revivir el dramático episodio.
Por la lesión, el ciclista debió pedir días de reposo en el trabajo ante la imposibilidad de utilizar el brazo derecho por varias semanas. “Da bronca esto porque no solo le afecta a la salud sino que le provoca un montón de gastos, y nadie se termina haciendo cargo: ni los dueños de los perros ni la Municipalidad”, expresó.
El ciclista instó a las autoridades municipales a que multen a las personas por los actos que provocan las mascotas que tienen sin cuidados.
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