Una persona identificada como Efraín Irwin Alcántara de 39 años de edad, de nacionalidad peruana, perdió la vida en la jornada de ayer producto de la inhalación de monóxido de carbono mientras descansaba en el domicilio de calle Ugarte 712 del barrio de Villa Italia.

El hecho se conoció cuando un amigo, que vive en el mismo lugar, se encontró con el óbito en una de las habitaciones de la casa que tenía para calefaccionarse un brasero con carbón.

La policía científica presume que el haber inhalado el monóxido que generó el brasero en sitio sin ventilación, fue lo que ocasionó el fallecimiento, por lo que tras cumplir con los recaudos legales, el cuerpo fue derivado a la morgue de Azul donde se le practicó la operación de autopsia.

Lo acontecido generó gran consternación entre familiares y amigos de Alcántara quienes de inmediato se aceraron hasta el mencionado domicilio, lugar donde trabajaron efectivos de la comisaría Tercera, Policía Científica y una unidad de la empresa Crespo, Iacaruso y Santillán que fue la encargada de trasladar el cuerpo hacia Azul para la correspondiente autopsia.

Son muchas las muertes que se han generado en Tandil en los últimos años por monóxido de carbono, pese a las recomendaciones y advertencias que se han difundido en los diferentes ámbitos nacional, provincial y municipal.

La gente a la hora de intentar combatir las bajas temperaturas que se registran en esta época del año, no tiene presente los riesgos que el mal uso de un artefacto o la escasa ventilación de un lugar les puede provocar.

Especialistas en la materia hablan mucho en cada temporada invernal sobre lo que se debe hacer y los cuidados que hay que adoptar para no ser víctimas del monóxido, sin embargo a la hora del intenso frío muchos no prestan la debida atención y terminan sucediéndose hechos como el de ayer que generan una profunda consternación en todos los que trataron y compartieron trabajo junto a Alcántara.

¿Intervención al
Ministerio de Trabajo?

La tragedia dominical por el accidente doméstico envolvió a los uniformados e instructores judiciales una sugestiva postura e interrogante frente al escenario con que se encontraron en la propiedad.

Si bien la vivienda desde su fachada resulta normal, una vez adentro en pos de dar con el luctuoso escenario, los investigadores se toparon con una postal por demás llamativa.

Una construcción con reformas por demás precarias dividida en varias dependencias pequeñas donde residían al menos seis personas, aparentemente todas de nacionalidad extranjera y que trabajaban en relación de dependencia del conocido comerciante oriental gastronómico Martín, de quien sería la propiedad en cuestión.

Sobre la precariedad de las dependencias, se detalló que donde fue hallado la víctima fatal, contaba con apenas una ventana de pequeñas dimensiones (símil a un ventiluz de baño) y que estaba tapado con un cartón.

La casa está en plena construcción de reformas y no tenía habilitado el servicio de gas, por ello los que allí residen se calefaccionaban con estufas eléctricas o, como en este lamentable caso, con un brasero con carbón.

Por lo que trascendió de la pesquisa, funcionarios policiales recibieron las directivas de la Justicia para que se de intervención al Ministerio de Trabajo para corroborar las condiciones en que viven los que allí fueron hallados y se certifique si están registrados como empleados del comerciante citado.

Prevención

El monóxido de carbono es un gas venenoso que no tiene color, olor ni sabor y por eso es muy difícil de percibir. Se origina por la combustión incompleta de gas natural, gas licuado, kerosene, carbón, leña, nafta (en motores de combustión), madera, papel y aceite, entre otros.

Su inhalación provoca daños en el sistema nervioso central, asfixia y consecuencias irreversibles, incluso la muerte en caso de concentraciones muy altas.

Los síntomas de intoxicación pueden presentarse en distintas combinaciones como:
confusión, mareos, dolor de cabeza, zumbido de oídos, náuseas, vómitos, palpitaciones, parálisis, convulsiones y coma.

En cuanto a las recomendaciones, no hay que dejar braseros, estufas ni otros artefactos para calefaccionar encendidos durante la noche. En cada lugar se debe asegurar una buena ventilación de los ambientes, porque la llama consume oxígeno.

Hay que controlar que la llama de los mecheros sea de color azul ya que si es amarilla produce monóxido de carbono. En caso que la llama del mechero sea amarilla, hay que apagar el artefacto inmediatamente y hacerlo reparar.

DEsde Tandil – Eleco