Tenía 64 años y una obra versátil.

El artista plástico Adrián Menna falleció este viernes a los 64 años, tras padecer una larga enfermedad. Autodidacta, hacia nacido en 1957 en la cuidad de Adolfo González Cháves, pero estaba radicado en Mar del Plata desde hacía décadas. Era hermano del cantante Santiago Menna, quien murió en marzo de este año y era conocido por haber integrado la embemática banda marplatense Los caballeros del Pedro Juan.

“Toda mi pintura tiene como una lectura que viene del constructivismo, y se ha ido deformando y se ha ido expandiendo”, dijo Menna en 2017, oportunidad en la que fue entrevistado por el Teatro Auditorium a propósito de una exposición que realizó en ese mismo centro de las artes.

“Trato (con las pinturas) de que cuando la gente las vea le hagan bien, que la saquen de su rutina y pasen a otro plano. Ya sabemos lo terapeútico que es el arte para la humanidad“, explicó, en esa misma entrevista. “Qué sería de la humanidad sin los artistas”, remató.

Expuso en New York, Miami, Barcelona, México, Costa Rica, Brasil y Barcelona. Desde 2010 a la actualidad, exponía en distintos espacios de la ciudad de Mar del Plata.

Su taller estaba en el Bosque Peralta Ramos. Una de sus últimas muestras fue el año pasado, en Brasil.

A la Galería Zagut, en Río de Janeiro, había llevado los trabajos de la serie Beach-Choza, pintura contemporánea, que denotaba un carácter íntimo y poético. Integró la muestra Viajantes 2020, cuya apertura se realizó de manera virtual.

En 2019 había participado de la muestra “La vuelta al pago”, que se desarrolló en el centro cultural Lafargue de su cuidad natal, González Cháves. En tanto que en Mar del Plata, otra de sus obras puede verse de manera permanente en una de las paredes de las escalinatas del teatro Radio City Roxy Melany.

Descontracturado, siempre abierto al diálogo y al humor, con formación autodidacta desde los años ’60 y con una obra versátil, Menna había hecho su primera muestra individual fue a los 16 años. Perteneció a los pintores de los años 80, cuando en el regreso de la democracia empezó a interesarse por acciones interdisciplinarias.

En ese sentido fue autor de cortometrajes en filmes en Super 8 y en video. También fue fundador en 1983 del grupo de Cine Kamikaze.

En 1988 trabajó junto al colectivo La Frontera, realizando la muestra multimedios “Grita Memoria”. Simultáneamente se desempeñó junto a la banda de rock de su hermano, Los Caballeros de Pedro Juan, en gráfica y video, realizando el arte de tapa de los dos CD editados por el grupo.

En marzo de este año, escribió un perfil de su hermano que publicó lacapital. En el texto, recordaba a Santiago y lo despedía con mucho dolor: “Si algo le tengo que agradecer a esta vida es haber compartido momentos trascendentes con tan luminosa persona. Las primeras conexiones con el rock fueron en el departamento de la calle Las Heras, en ese hogar compartíamos cuarto, él tendría diez años y se sentaba a escuchar a mi lado a Moris, Tanguito, Litto, Spinetta a la vieja escuela, vinilo vuelta y vuelta memorizando las letras, así fue escuchando desde Mercedes Sosa, pasando por los Beatles, los Rolling hasta Pink Floyd. Después él solito eligió el Punk, me hablaba todo el día de los Sex Pistols, New York Dolls, Clash y otros”.