Un exempleado de la empresa de alarmas ADT ubicada en Dallas, Estados Unidos, logró explotar un “backdoor” -una vulnerabilidad en el sistema- y usó las cámaras de seguridad para espiar a parejas en situaciones íntimas.
Telesforo Avilés, de 35 años, reconoció que durante un período de cinco años accedió a las cámaras de aproximadamente 220 cuentas de clientes en más de 9.600 ocasiones, por supuesto sin el permiso o conocimiento de clientes.
Incluso, tomó nota de las casas con mujeres que encontraba atractivas y luego veía las cámaras. Reconoció que observaba a mujeres y parejas desnudas mientras tenían relaciones sexuales.
Avilés fue más allá, y le contó a la Justicia cómo hizo para ingresar a un sistema que se supone ex inexpulgable, más aún para un exempleado: agregaba su dirección de correo electrónico a la lista de usuarios autorizados para acceder a las cuentas ADT de los clientes.
Esto permite al usuario conectarse de forma remota al sistema de seguridad del hogar ADT para que puedan encender o apagar las luces, activar o desactivar las alarmas. Y también acceder al registro de las cámaras de seguridad.
Les decía a los usuarios, en ocasiones, que tenía que sumarse a él mismo a esa lista para poder “probar el sistema”. En otras ocasiones se agregaba sin conocimiento de las víctimas.
Avilés reconoció su accionar el jueves pasado en el Tribunal de Distrito de los Estados Unidos para el Distrito del Norte de Texas, donde se declaró culpable de un cargo de fraude informático y un cargo de grabación invasiva.
LaVoz