En tanto, en diálogo con Télam el argentino Ariel Gómez, que vive desde noviembre de 2018 en la ciudad de Móstoles, 20 kilómetros al sur de Madrid, contó que experimenta la misma situación que su compatriota, y que se encuentra “confinado en la ciudad, sin poder ir a trabajar por los cortes en las rutas”.

“El primer día fue hermoso ver nevar, sobre todo por los chicos (tiene tres hijos de 8, 10 y 15 años), pero ahora la situación no es tan agradable y empezamos a tener problemas de abastecimiento porque los supermercados están cerrados”, explicó el argentino que trabaja en un restaurante de Pozuelo de Alarcón, al que no va desde ayer por el corte de las autopistas de circunvalación de Madrid.

La unidad militar intervino en varios ejes viales, con sus vehículos quitanieves, y acudió en ayuda de los automovilistas atrapados por la nieve. Según los servicios de emergencia de la región de Madrid unos “1.500 vehículos” fueron “liberados” este sábado por la mañana, según AFP.

Todos los establecimientos educativos, desde los jardines de infancia hasta las universidades, permanecerán cerrados lunes y martes
En la capital los autobuses públicos fueron suspendidos, así como la recogida de basura. Además, fue cerrado el aeropuerto internacional de Barajas desde el viernes por la noche y así seguirá toda la jornada del sábado por “razones de seguridad”.

El viernes, ya fueron anulados una treintena de vuelos y otros tantos fueron obligados a aterrizar en otros lugares.

 

Es el temporal más intenso de los últimos 50 años. El aeropuerto de Madrid está cerrado y parte del país, paralizado por la tormenta.

Al menos tres personas fallecieron por una fortísima tormenta de nieve que se registra desde el viernes en España, inédita en medio siglo y por la que centenares de vehículos quedaron bloqueados, se cerró el aeropuerto de Madrid y parte del país está paralizado, aunque se espera que lo peor del fenómeno ocurra la semana que viene, con temperatura de 15 grados bajo cero.

“Afrontamos el temporal más intenso de los últimos cincuenta años”, aseguró este sábado el ministro español de Interior, Fernando Grande-Marlaska, tras “lamentar tres fallecimientos” en la tormenta y pedir a los ciudadanos de las regiones más afectadas que permanezcan en sus casas.

Este temporal o borrasca, bautizado como “Filomena”, hizo que se declarara la alerta roja en cinco regiones de España, entre ellas Madrid.

Las vías terrestres, ferroviarias y aéreas fueron cortadas por las violentas borrascas de nieve que se abaten desde el viernes por la tarde sobre gran parte del país, según precisó la agencia de noticias AFP.

El ministro insistió en que las “nevadas van a pasar a ser heladas” en los próximos días, y las temperaturas de hasta -10 grados están previstas para la semana entrante.

“Evitemos los desplazamientos y sigamos las indicaciones de los servicios de emergencia. Máxima vigilancia ante la tormenta Filomena”, tuiteó por su lado el presidente de gobierno Pedro Sánchez, y saludó el trabajo de los “profesionales que intentan acudir en ayuda de las personas atrapadas por la nieve”.

En la capital, que no había conocido semejante nevada desde 1971, se vieron esquiadores en la célebre plaza de la Puerta del Sol e incluso a un hombre en un trineo tirado por cinco perros.