MANIFIESTO DEL CONSEJO LOCAL DE PROMOCIÓN Y PROTECCIÓN DE LOS DERECHOS DE LAS NIÑECES Y ADOLESCENCIAS DEL PARTIDO DE GENERAL PUEYRREDON

Ante la asunción del nuevo gobierno nacional de la República Argentina a cargo del Presidente Javier Milei y la implementación de su proyecto político que contempla la denominada “Reforma del Estado”, implicando en los hechos un brutal ajuste económico y un desguace de todas las políticas que garantizaban derechos, DECIMOS:

1.- Es mentira que el ajuste es sobre lo que Milei denomina “la casta” (o sea el sector político o de determinados poderes), ya que el recorte es a costa del hambre, sufrimiento y desamparo de nuestras niñeces y adolescencias, a quienes se los están privando de sus derechos humanos elementales;

2.- La concepción retrógrada y cruel expresada en el DNU 70/2023 en todo lo concerniente a las niñeces y adolescencias se remite a un paradigma previo a reconocer la experiencia de la niñez, de principios de la Edad Media, que consideraba al niño como un hombre pequeño, negando su aptitud como titulares de derechos e incumpliendo con todas las leyes que basadas en el paradigma actual de protección integral, exigen un Estado garante de derechos y no la desresponsabilización y abandono de los chicos y chicas.

3.- El DNU agudiza el estado de vulnerabilidad de los chicos, chicas y chiques de diferentes formas:

a.- Negándoles los alimentos que el Estado les proveía a los comedores y a las familias en situación de pobreza -en un país con aproximadamente cuarenta y seis millones (46.000.000) de habitantes mientras produce alimentos para cuatrocientos millones (400.000.000) de personas;

b.- Profundizando la política represiva y mediante la propuesta de bajar la edad de punibilidad como respuesta ridícula a la inseguridad;

c.- Reduciendo las posibilidades de ejercer el derecho a opinar y ser partícipe activo en las discusiones de los temas que les incumben;

d,.-Perpetuando la pobreza multidimensional, ya que la desrregulación económica (que incluye tarifas de los servicios públicos, alquileres, alimentos, cuotas de colegios privados, servicios de salud, medicamentos, entre otros) y la falta de un Estado presente, pone en especial desventaja a los niños y niñas frente al mercado;

e.- Dificultando la organización familiar del cuidado de las niñeces, ya que la apertura indiscriminada de las importaciones aumentará el desempleo y el trabajo informal que pretenderá ser cada vez más precario; y sin acompañamiento suficiente de espacios y redes para el cuidado por parte de otros actores del sistema.

4.- El desamparo actual a la niñez es parte de una política pública premeditada. Ejemplo de ello es lo expresado en los artículos 504 y 518 del Proyecto de la Ley Ómnibus que pretendió eliminar la Ley de los Mil Días de “Atención y Cuidado Integral de la Salud durante el Embarazo y la Primera Infancia”, a través de la cual el Estado protege, fortalece y acompaña el cuidado integral de la vida y la salud de las personas gestantes y en especial a las niñas y los niños en sus primeros 3 años de vida.

De forma complementaria, el intento de anular la Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) garantizada por ley, implicaría legitimar el embarazo de personas gestantes que durante su niñez sufren abusos sexuales intrafamiliares, negar su autonomía para decidir con información y abandonar a quienes decidan continuar con sus embarazos.

5.- La preservación de la vida es sólo para quienes puedan pagarla. La “motosierra” (metáfora usada por el Presidente para simbolizar el recorte o ajuste) sobre las acciones de la Dirección de Asistencia Directa por Situaciones Especiales (DADSE), pone en total estado de supervivencia a gran parte de la población. Aquellos chicos y chicas sin cuidados parentales, y los grupos familiares sin obra social que se encuentran realizando tratamientos oncológicos o que tienen enfermedades crónicas discapacitantes y patologías agudas graves y requieren medicaciones costosas, han aumentado su riesgo de muerte, ya que hoy el Estado no las está proveyendo, peligrando además el cuidado y crianza de los niños y niñas de esos grupos familiares.

6.- El recorte es directo sobre las políticas públicas tendientes a garantizar el desarrollo integral de las niñeces y adolescencias, entre los que se encuentran el derecho a la educación. La decisión arbitraria de no remitir el dinero que la Nación debe girar a las provincias para que éstas puedan solventar en parte el proceso educativo, no sólo precariza a los y las trabajadores de la educación, sino que priva a las niñeces de materiales didácticos, mejoras edilicias y provisión de insumos en general para que las escuelas funcionen en condiciones óptimas. Esos fondos son el FONID (Fondo de Incentivo Docente), el Fondo de Conectividad y el Fondo de compensación salarial, además de otros programas como infraestructura, tecnología, incremento de jornada escolar e inversión en formación docente y educación técnica.

7.- El desincentivo nacional mediante la desinversión en la promoción y protección de los derechos de los pibes y pibas, afecta de forma peculiar a los chicos y chicas de General Pueyrredon, ya que la precariedad de la gestión y la desfinanciación de la política pública en materia de niñeces y adolescencias se ve reflejada desde hace 8 años en:

a.- La escasez de turnos para la atención pediátrica en los CAPS;

b.- La precariedad de la política territorial de promoción de la salud de nuestros pibes y pibas;

c.- La discontinuidad de la merienda reforzada en las escuelas municipales;

d.- Las deficiencias notorias en el abordaje integral de la salud mental de las niñeces y adolescencias;

  1. El vaciamiento de la política cultural -que no hace tantos años atrás supo desarrollarse en las barriadas populares-, hoy priva de juegos, momentos de encuentro y desarrollo de habilidades a los chicos y chicas que viven alejados del centro de la ciudad de Mar del Plata.

Éste año se cumplen 35 años de la Convención Internacional sobre los Derechos del Niño –que hoy entendemos como niñeces y adolescencias-, instrumento de protección de derechos humanos firmado y ratificado por Argentina, junto con la mayoría de los países del mundo. Allí no sólo se reconoció a los chicos y chicas como titulares de derechos, sino que se estableció que los Estados deben garantizar una especial protección. Asimismo, nuestro país le otorgó a está norma el mismo rango, la misma importancia, que la Constitución Nacional.

Es útil puntualizar que:

a.-La ley 26.061 de septiembre de 2.005 se dictó para que los derechos de NNyA sean plenos, efectivos y permanentes.

b.- Rigen las reglas internacionales que otorgan progresividad y no regresividad en todos los casos:

c.-En caso de conflicto de intereses con otros derechos igualmente legítimos, deben prevalecer los de NN y A. En consecuencia, el Estado Argentino de forma consiente ha decidido violar los derechos de los niños y niñas acordados con gran parte de los países del mundo.

En conclusión, nuestro país es productor de alimentos, tiene una de las mayores reservas de agua dulce del mundo y una extensión territorial de 3.669.711 km².

Por ello:

NO ADMITIREMOS EL ATROPELLO DE NINGUNO DE SUS DERECHOS BÁSICOS.

Ni el hambre ni la sed de nuestros pibes y pibas, ni que se los prive del acceso a la cultura que les posibilita tanto jugar como forjar una identidad propia, ni que no tengan una casa en donde vivir con sus familias, ni que se descuide a los profesionales e idóneos que todos los días ponen el cuerpo para acompañarlos y fortalecerlos a ellxs y a sus familias.

No vamos a ser cómplices de muertes injustas ni vidas miserables.

CON NUESTROS PIBES Y PIBAS NO!