Otro hecho lamentable para la cultura sacude la opinión pública, es que Javier Milei anunció que el festival que tiene lugar durante el mes de noviembre y es único de Clase A en Sudamérica, tendrá su fin.

El recorte de fondos que está llevando adelante el Gobierno nacional continua con el emblemático Festival Internacional de Cine de Mar del Plata. La noticia fue confirmada por el nuevo presidente del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA), el economista Carlos Luis Pirovano, quien se reunió con los trabajadores del sector, nucleados en la Asociación Trabajadores del Estado (ATE), y confirmó que descontinuará el financiamiento.

  • A su vez, ayer los trabajadores fueron notificados que la nueva gestión no sólo desfinanciará el Festival Internacional de Cine, sino que además no reincorporará a los trabajadores despedidos, cerrará el histórico y recuperado Cine Gaumont, así como también las plataformas Cine.Ar y Cine.Ar Play.

Pirovano anticipó la intención del Ejecutivo nacional de avanzar en la privatización de la Escuela Nacional de Experimentación y Realización Cinematográfica (ENERC), una institución clave en la formación de nuevos talentos del cine argentino.

“Estas decisiones representan un golpe para la industria cinematográfica argentina, ya que estos festivales son vitales para la promoción y difusión de las producciones locales a nivel nacional e internacional“, indicaron los trabajadores tras el encuentro que mantuvieron con el nuevo titular del INCAA.

De acuerdo al documento difundido por los trabajadores, durante el encuentro Pirovano “negó rotundamente la posibilidad de dar marcha atrás con las medidas, argumentando que el INCAA gasta más del 60% de su presupuesto en salarios y funcionamiento”.

“Llamamos a la comunidad audiovisual a declararse en estado de alerta y movilización y coordinar con la mayor unidad de todos los sectores las medidas necesarias para enfrentar este ataque brutal“, indicaron los trabajadores, al tiempo que lanzaron una campaña de firmas para rechazar la “política de desguace” del INCAA.