La empresa San Francisco de transporte urbano se fue de La Rioja dejando a los choferes desempleados. Desde la gobernación provincial encabezada por Ricardo Quintela (PJ) resolvieron abrir una empresa estatal llamada Rioja Bus que no va a absorber a toda la nómina, por lo que los trabajadores reclamaban soluciones para esta situación. La policía se presentó en el lugar y reprimió duramente con heridos de gravedad y detenidos.

A principios de mes, la secretaria de Transporte provincial, Alcira Brizuela habló con Fénix sobre la situación de la nueva empresa de transporte y los trabajadores que quedaron en la calle por parte de la empresa San Francisco. Advirtió que Rioja Bus tomará como choferes a 80 de los 177 que tenía San Francisco, y aclaró que “al resto lo vamos a contener”, aunque no explicó de qué manera.

La falta de respuestas concretas por parte de la Justicia al conflicto con San Francisco y del Gobierno provincial determinó la protesta y la presencia de la policía que lejos de pacificar o acompañar el reclamo, desencadenó una jornada de violenta represión.

Por su parte, la ministra de Seguridad Gabriela Asís dijo a Nueva Rioja: “Nunca existió orden de reprimir y sí de contener un reclamo. Cualquier situación o exceso es materia de investigación”.

Entre las personas heridas, InfoGremiales recibió la denuncia de un trabajador que perdió un ojo por los golpes. Según consignó Fénix también se registraron 3 personas detenidas, dos mujeres y al delegado de los choferes, Eduardo Perazzo.

Tras la represión y las detenciones en el centro, los choferes volvieron a la sede de la empresa, donde continúan con las protestas, cortando la circulación en avenida Cabo Primero Rodríguez.