Los reclamos se reiteran y las respuestas no llegan. Notas como estas hemos hecho en los últimos meses, una cada diez días. Siempre tratando de hacer visible el estado en que se encuentra La Serena en muchos aspectos.
Calles que se transforman en barro, vecinos que no pueden ni salir o entrar de sus hogares, el no cumplimiento de las frecuencia de colectivos, ambulancias y patrulleros que no pueden ni circular por la zona y la inseguridad que también acecha. Un combo perfecto para la definición de abandono en que se encuentran.
Esto nos decía María Inés Benítez presidenta de la Sociedad de Fomento de La Serena al respecto:
En relación al funcionamiento del Comité de Emergencia y los problemas de transporte nos aseguró que:
El otro punto de preocupación es el estado de las calles: muchas veces, el colectivo, las ambulancias y los móviles policiales no pueden ingresar al barrio “y la lluvia de los últimos días no ayudan”, dijo la mujer y añadió que «cuando llueve por uno o dos días, manejar por esa calle se torna imposible».
Hace dos meses se contactaron con la Sociedad de Fomento desde la Delegación Puerto para tratar de coordinar trabajos de mejora en las calles, pero hasta ahora “no se pudo hacer nada”, concluyó Benítez.