Carmela es una empresaria dedicada a la decoración de interiores. Está cumpliendo reposo por coronavirus y no tiene gravedad.

Una empresaria uruguaya de 57 años, dedicada a la decoración de interiores y remodelaciones, es una de las primeras afectadas por coronavirus. Al regresar de Europa fue a una boda a la que asistieron otras 500 personas. Viente de ellas tienen síntomas que requieren exámenes de Covid-19.

La mujer, identificada como Carmela, se enteró que tenía coronavirus en la tarde del viernes. Es uno de los cuatro casos que se registraron en el país y está en su casa cumpliendo reposo y no reviste gravedad.

La mujer viajó a Milán y tuvo fiebre, 41 grados, luego volvió a Montevideo y viajó a Madrid, donde se sintió mal y tuvo tratamiento médico sin saber aún que estaba infectada con el Covid-19. Cuando regresó a su país pidió que le hicieran el análisis y, según contó, como no le dieron importancia se fue a la fiesta multitudinaria en Carmelo, Uruguay.

“El 22 de febrero viajé a Madrid con destino a Milán pero no pude ingresar y el 6 de marzo volví a Uruguay. Pregunté si había alguna medida en el aeropuerto porque venía de Europa y me dijeron que no. Ese mismo día almorcé con mi madre de 84 años y de noche fui a un casamiento con 500 personas “, contó en sus redes sociales.

Carmela dijo que estaba angustiada por lo que atraviesa y por el peso de una culpa de posible contagio a amigos de Uruguay. En la fiesta, mientras tosía y contó que que algunos amigos le hacían bromas: “No tendrás coronavirus”.

Uno de quienes fueron a la fiesta es responsable de entrenamiento de un equipo deportivo y luego de acusar síntomas de posible afectación de Covid-19, todos los deportistas están realizándose análisis.