Las bebas siamesas que habían nacido en setiembre último en la ciudad de Córdoba unidas por los órganos del abdomen, hígado e intestino delgado, fueron separadas exitosamente, informaron fuentes del Hospital de Niños donde se realizó el procedimiento quirúrgico.

La intervención “fue una tarea compleja de separación y reconstrucción individual que resultó exitosa”, dijo el jefe del Departamento Quirúrgico del Hospital de Niños, Enrique Romero, a medios locales.

Explicó que trabajaron más de 30 profesionales que integraron un equipo interdisciplinario y añadió que “lo recomendable en estos casos es esperar seis meses para la separación pero debido a la oclusión intestinal, una de las partes que las unía e impedía la alimentación, la cirugía tuvo que adelantarse”.

El trabajo quirúrgico demandó alrededor de cinco horas y hoy se encuentran en proceso de recuperación posoperatorio en sala de terapia intensiva, con “pronóstico reservado pero estables”, manifestó Romero.

Las siamesas, Esperanza y Milagros, habían nacido mediante cesárea el 19 de agosto último en el Hospital Materno Provincial Dr. Raúl Felipe Lucini, con 34 semanas de gestación, y unidas pesaban 4.500 kilogramos.