Vanessa Gómez Cuevas, obligada a abandonar el país en febrero de este año y dejar a dos de sus hijos acá, fue autorizada a volver a la Argentina.
La Dirección Nacional de Migraciones (DNM) resolvió este lunes levantar la prohibición de ingreso al país para Vanessa Gómez Cuevas, de 33 años, quien fue expulsada en febrero pese a que había cumplido una condena de cuatro años de prisión en el Penal de Ezeiza de Mujeres.
Vanessa es mamá de tres hijos argentinos: una de 14, un nene de 5 y un bebé de dos años. Como el más chiquito todavía es lactante, la Justicia resolvió que la mujer sea expulsada con él, a pesar de ser un ciudadano argentino.
La mujer, de origen peruano, había sido contratada por una banda de narcotraficante como “mula” para ingresar estupefacientes al país. En 2011 cumplió una condena de cuatro años de prisión en el Penal de Ezeiza de Mujeres.
Pese ésto y a que la Ley de Migraciones, la Constitución Nacional y de la Convención sobre los Derechos del Niño contemplan la reunificación familiar por sobre todo en los casos; fue deportada a principios de año por tener antecedentes penales.
Ahora una nueva resolución firmada por Horacio García, director de DNM, desestimó esa prohibición. Varias organizaciones de migrantes, junto a otras de derechos humanos, convocaron el miércoles 4 de septiembre a las 18:00 horas una juntada en el Obelisco, para celebrar el regreso de Vanessa y por los expulsados arbitrariamente que aún no pueden volver al país.
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