En la localidad bonaerense de Cañuelas, un humilde albañil, de 35 años, fue asesinado a tiros de escopeta por dos presuntos justicieros, quienes lo acusaban de haber participado, junto a otros hombres, en el robo de cervezas de un kiosco propiedad del hermano de uno de los homicidas. Ambos criminales finalizaron detenidos por los efectivos policiales. Familiares de la víctima reclaman justicia y que el caso no quede en la impunidad, luego de afirmar que el trabajador no era un asaltante.
Los voceros del departamento judicial de La Plata revelaron a cronica.com.ar que Carlos Andrés Nochetti, de 35 años, perdió la vida, debido a graves heridas de arma de fuego en las piernas y en el estómago, en el Hospital Cuenca Alta, en Cañuelas, y tras haber sido asistido por los médicos en un comienzo en el Hospital Municipal Angel Marzetti, en el mismo distrito.
De acuerdo a lo manifestado por los informantes, los hechos empezaron días atrás cuando Nochetti fue agredido a disparos por dos individuos mientras se hallaba en el cruce Berrueta y Santa Cruz.
Trascendió que los atacantes huyeron con rapidez en una camioneta Chevrolet S-10 blanca, dominio HSZ 930.
Servidores públicos de la comisaría 1ª de Cañuelas, apoyados por los integrantes del Comando Patrulla (C.P.), empezaron a rastrillar la zona y finalmente apresaron a los mencionados sujetos, que habían abandonado el rodado en la esquina de Kennedy y Tucumán, comprobándose luego que los implicados tenían 30 y 20 años.
Versiones sostienen que los criminales quisieron hacer de justicieros y atacaron a disparos al albañil porque consideraban que, horas antes y en compañía de al menos otros cuatro individuos, habían llevado adelante un robo, en un kiosco, propiedad de uno de los hermanos del mayor de los asesinos, llevándose botellas de cerveza de dicho negocio.
Pero los parientes del trabajador negaron las acusaciones y señalaron que el hombre herido era inocente del mencionado asalto en el establecimiento comercial.
Miembros de la Policía Científica realizaron una serie de pericias en el escenario del ilícito.
Intervino en la causa, que fue caratulada “Homicidio agravado”, el doctor Lisandro Damián Damonte, fiscal de la Unidad Funcional N° 1 de Cañuelas, dependiente de los tribunales platenses. /Crónica
