Con el objetivo de quitar especies “peligrosas” como los eucaliptos que suelen “tener poca raíz y en días de viento se desprenden”, y  lambertianas que se desgarran, produciendo la caída de ramas enteras, en la zona trabajan distintos referentes del Municipio en conjunto con las y los vecinos, para cambiarlos por plantaciones más seguras.

Natalia, presidenta de la sociedad de fomento del barrio Las Dalias, relató a MdpYa cómo surgió esta iniciativa: “Hace unos días nos enteramos que el club Bigua que está en la entrada del barrio y en las calles Beltrán y Gandi, bajo la autorización del Enosur y Emsur, inició un proyecto de recambio forestal que implicó la extracción de 29 eucaliptos, que están sobre la calle Gandhi y bordean al lugar.”

Estos árboles, indicó la vecinalista, están dentro del terreno perteneciente al club, pero al ver las obras  algunxs vecinxs se opusieron y se enojaron ante la tala, autoconvocandose en las inmediaciones del establecimiento. Más tarde, se realizó una reunión con integrantes del club, del Emsur, del Enosur, responsables del parque, técnicos del municipio, vecinos autoconvocados y responsables de  la sociedad de Fomento, para intercambiar opiniones.

“Se decidió frenar el proyecto que se estaba llevando a cabo, sin embargo la red de vecinos sigue organizada. Se está empezando a trabajar en una mesa con vecinos y con el club, para analizar qué impacto tendrá este recambio forestal,” mencionó Natalia a MdpYa.

Cabe destacar que estos árboles tienen alrededor de 100 años,  en algunos casos llegan a los 40 metros y otros están secos, sin embargo un sector de vecinos asegura que quitarlos perjudicaría al resto del arbolado, por eso mantienen la postura respecto a la reforestación.

“Le pedimos al club que muestre y comunique a los vecinos cuál era su proyecto, que muestre una foto de cómo iba a quedar, que nos cuenten los argumentos considerando que es la entrada de un barrio que es una reserva forestal y que si bien se realizan talas y podas ilegales, en general se cuida bastante el arbolado de la reserva, por lo que este proyecto tendría mucho impacto,” aseveró la presidenta de la sociedad de fomento.

Pese a las insistencias, el club Bigua decidió avanzar igual, pero los vecinos pusieron un freno. “Estamos aunando criterios para poder realizar lo que el club necesita para continuar creciendo, ellos quieren hacer unas canchas de césped sintético para hockey femenino, queremos ver de qué manera podemos atender a esto,” finalizó Natalia.

Lara E. Franco – Redacción MdpYa.