En el último día de la primera mitad del año lectivo, el gobierno de la Ciudad más rica del país le informó a la asociación gremial de docentes Ademys que el porcentaje de acuerdo paritario pactado en marzo de este año, que rondaba los 7 puntos.

Unos 20 días antes de que se viera de cerca en nuestro país la pandemia, el gremio y las autoridades porteñas habían acordado un aumento para los salarios docentes. Luego, el aislamiento planteó muchos desafíos pero el semestre salió adelante con un denodado esfuerzo.

Aún así, a 17 días de empezado el mes en el que debían recibir un aumento, el ministerio encabezado por Soledad Acuña les anunció que no van a recibir con el aumento de sueldo acordado: «Esto cristaliza el congelamiento salarial que rechazamos en las calles junto al resto de lxs trabajadorxs estatales y personal de la salud», afirmaron desde Ademys.

Esta decisión pone en riesgo la continuidad y el ya delicado estado de la educación pública de la Ciudad: «Convocamos a organizarnos en cada escuela y llamamos a una Asamblea Abierta para toda la docencia y sindicatos en la última semana de julio, para debatir y organizar el No Inicio de las clases después del receso invernal.»