Pese a la cantidad de gente que todos los días llega al lugar para disfrutar de sus instalaciones, el predio carece de juegos para las infancias. Además, la falta de fogones y vigilancia para los hechos de inseguridad y para la quema de árboles genera gran preocupación.

Gustavo es parte de la comunidad y dialogó con MdpYa sobre el estado del Parque Camet. El faltante de hamacas, subibajas y asientos es algo que reclama el sector hace por lo menos, cuatro años. “Suponemos que  por el vandalismo se han llevado diversos juegos, pero pasa el tiempo y no se reponen. En un momento se habían puesto dos hamacas pero se robaron los asientos también”, relató el vecinalista.

“Estas imágenes no son actuales, hoy el Parque Camet está desierto. Los domingos hay muchísima gente que se acerca al lugar, pero no hay fogones suficientes, tampoco juegos para los chicos, es increíble realmente, en una plaza para chicos no hay juegos”, aseveró.

Ante la falta de mantenimiento de las cadenas, hamacas y subibajas, el sector se organizó y pintó algunos juegos, sin embargo al tiempo de este hecho ya no estaban más, las y los vecinxs creen que el Municipio se llevó los juegos para completarlos y armarlos, sin embargo no hay comunicación entre las partes.

“Se llevaron todos los subibajas, supuestamente para arreglarlos porque estaban en muy mal estado. Nosotros los habíamos pintado hace un tiempo al igual que los caños de los juegos de hamacas, pero también se las llevaron. La Municipalidad supuestamente estaría haciendo algo sobre estos juegos, pero en este momento está todo vacío, están los armazones hace por lo menos cuatro años”, explicó.

Gustavo remarcó que el parque es difícil de mantener porque el predio es muy grande, por este motivo celebró que el pasto esté bien cortado pero pidió además mayor presencia de vigilancia.

“Hace poco se robaron 300 metros de cable que alimenta el Club Pueyrredón  y juegos inflables que hay en la costa”, denunció. Otra problemática que mencionó el vecino es la quema de árboles los días domingo en donde diversas personas utilizan ramas para prender el fuego, pese a que este hecho está prohibido.

Lara E. Franco – Redacción MdpYa