La cadena de valor integrada por las empresas autopartistas y el canal de comercialización plantearon hoy la necesidad de una agenda común para avanzar hacia un desarrollo más diversificado y sostenible, que armonice el impulso de los mercados regionales industrializados en el escenario de disrupción que plantea el cambio de paradigma de la movilidad sustentable en el Mercosur.

Las principales cámaras del sector automotor de los países miembros del Mercosur participaron hoy de un encuentro realizado en el Palacio San Martín sobre “Transición hacia la movilidad sustentable”, impulsado por el Capítulo Automotor de la 10° edición del “Foro Empresarial del Mercosur”, dentro de la Presidencia Pro Témpore Argentina del bloque.

“Para acompañar el proceso de transición hacia la movilidad eléctrica a nivel global es fundamental contar con un marco que favorezca las inversiones con previsibilidad macroeconómica y esquemas que generen confianza entre proveedores y clientes, encauzando así proyectos comerciales sostenibles”, expresó Raúl Amil, vicepresidente de la Asociación de Fábricas Argentinas de Componentes (Afac).

Para el directivo autopartista, “es indispensable poner foco en la competitividad sistémica, con menos impuestos a la producción y la inversión, mejor infraestructura, más capacitación para los equipos de trabajo y esquemas laborales adaptados a las nuevas tecnologías”.

Para el presidente de la Asociación de Concesionarias de Automotores (Acara), Sebastián Beato, “el Estado tiene que actuar como articulador con terminales y concesionarias que ya están haciendo su tareas y el sector público debe acompañar con incentivos fiscales, infraestructura y campañas de promoción para lograr la escalabilidad necesaria”.

“El Mercosur debe estar unido para tener mayor fuerza para la industria automotriz, y estar adaptados a otras tecnologías que junto a los motores de combustión van a convivir durante varios años porque no estamos preparado para un shock del auto híbrido o el eléctrico”, agregó Beato al asegurar que en esa transición “la transformación del concesionario vino para quedarse”.

Por su parte, el vicepresidente de la brasileña Federación Nacional de Distribución de Vehículos Automotores (Fenabrave), Ricardo Lima, afirmó que en su país ” hay una visión bien realista de la transición hacia la electromovilidad con un auto híbrido flex, que permita aprovechar la tecnología lograda en el etanol, junto con el eléctrico para delinear el camino”.

“Las montadoras y autopartistas que invierten mucho para vehículos más modernos, los concesionarios que son centros de prestación de servicios, y el consumidor que está ávido de consumir vehículos de baja emisión o emisión, requieren de gobiernos que tienen que promover con incentivos fiscales el desarrollo de una cadena perfecta”, afirmó Lima.

El presidente de la Asociación de Industriales Metalúrgicos (Adimra), Elio del Re, afirmó que la transición a la electrificación “impone a los autopartistas un importante desafío: La adaptación de las empresas requiere de un marco adecuado para la inversión y el apoyo del sector público, junto con una articulación de toda la cadena, para que emerja un sector autopartista competitivo y perfectamente adaptado al modelo de la electromovilidad”.

Finalmente, el secretario Administrativo de Unión Obrera Metalúrgica (UOM), Osvaldo Lobato, la región tiene “los recursos naturales, la ciencia y la tecnología, la experiencia de los empresarios del sector y trabajadores con competencias calificadas para ocupar un lugar estratégico hacia la industria de movilidad sustentable. Es hora de impulsar grandes y amplios acuerdos para garantizar el desarrollo presente y futuro”.

Télam