La red de sospechas se extiende. Este miércioles, la Policía Federal y la PSA allanaron la seccional de Mayor Buratovich, en donde cumplen funciones los cuatro policías investigados por la desaparición de Facundo Astudillo Castro.

En el procedimiento se incautaron celulares, equipos de trunking para comunicaciones de radio, registros internos. También, una camioneta Toyota Hilux de la fuerza provincial, el vehículo 23360 que fuentes judiciales y policiales afirmaron a Infobae que se sospecha fue la camioneta presente en el control policial donde Facundo fue visto con vida por última vez.

Ayer por la mañana, el sitio La Brújula 24 publicó una foto de Facundo en ese control, con esa misma camioneta que será peritada por la Policía Federal en busca de rastros que ubiquen en el vehículo al joven de 22 años de Pedro Luro, que lleva más de dos meses desaparecido. La publicación sorprendió a los abogados Luciano Peretto y Leandro Aparicio, querellantes del caso que representan a Cristina, la madre de Facundo, que desconocían de su existencia. Sin embargo, según la querella, no sería el único móvil involucrado.

Hoy por la mañana, ambos abogados presentaron ante la Justicia federal que investiga el caso bajo la calificación de desaparición forzosa con la magistrada María Florencia Marrón y el fiscal Santiago Martínez un pedido de secuestro de nuevos vehículos desconocidos en base a testimonios presentes en la causa.
“Los testigos describen al patrullero involucrado como una camioneta TOYOTA HILUX, de color blanca y negra, siendo ello a todas luces respectivo a otro vehículo que el que ha sido secuestrado, debiéndose empinar la medida de secuestro y posterior pericia entonces, hacia aquellas manifestaciones que de manera indubitable y certera ofrecieran los testimonios más importantes y congruentes de la causa”, argumentaron los abogados en el pedido al que accedió este medio.

Así, fueron por más: pidieron que se secuestren todas las camionetas policiales blancas y negras en el distrito de Villarino, que incluye a Buratovich, a Pedro Luro -de donde es oriundo Facundo- y zonas como Médanos y Teniente Origone. También entregaron una imagen de referencia, que ilustra esta nota.

Hasta ahora, no hay ningún policía detenido a pesar de múltiples contradicciones en sus declaraciones. Cristina, la madre de Facundo, aseguró ayer en diálogo con Infobae otras coincidencias que llegaron a su conocimiento. El 15 de junio se suspendió la primera fecha destinada a la realización de un rastrillaje en Mayor Buratovich. “Ese mismo día, una oficial de apellido Flores, declaró ante la comisaría de Villa Luro que, después de labrarse el acta, ella lo llevó a Facundo en su auto particular hasta Teniente Origone”.

“Ese día, otro oficial de Origone, de apellido González, me dijo que le había hecho una nueva multa en esa ciudad a Facundo. Que mi hijo no llevaba el DNI y hasta me mostró con su celular una foto de la licencia de conducir de Facundo. Después dijo que vio a Facundo subiéndose a una camioneta Renault Oroch gris y que el vehículo se esfumó en dirección a Bahía Blanca”, continuó.

“Pero lo peor es que cuatro días después, cuando ese mismo oficial tuvo que declarar en la comisaría, cambió su versión y dijo ahora que mi hijo se había marchado del lugar a pie”, dijo la madre.

“A lo largo de todo este mes fuimos manoseados de todas las maneras. Policías que decían una cosa en la comisaría y después declaraban otra cosa ante la Justicia. Demoras en las búsquedas. Yo estoy cansada y con mucha rabia. Quiero que aparezca mi hijo, que lo encuentren vivo o muerto, pero que aparezca”, se lamentó ayer Cristina.

El fiscal Martínez, por lo pronto, mantiene la causa en estricta reserva.