La joven denunció en sus redes sociales que en la madrugada de este jueves fue con un amigo al boliche de Santiago del Estero entre Colon y Almirante Brown. En la puerta, el patovica le dijo que con el pañuelo, que siempre lleva atado a la riñonera no podía entrar: “Tenés que sacarte eso”.

Ella accedió pero cuando ya estaban dentro del boliche, volvió a atarlo a su riñonera. A los diez minutos aparecieron otros dos patovicas en el medio de la pista, delante de ella y su amigo. No los dejaron seguir caminando y les dijeron “Se tienen que ir” mientras señalaban el pañuelo.

“Además de repudiar a CLIP –el nombre del boliche- y la decisión de sacarnos como si estuviera vendiendo droga solo por llevar mi pañuelo verde, que todo el mundo sepa que, orgullosamente, lo vamos a seguir llevando”, escribió la chica en sus redes.

Además, sostuvo que lo llevarán en las riñoneras, las mochilas, los cuellos, los puños. “Porque es símbolo de lucha y porque lejos de ser algo negativo, transmite todo aquello que pensamos y defendemos. Siempre, hasta #Quesealey”.