El conductor se manifestó por primera vez luego de haber estado en terapia intensiva y contó su experiencia en primera persona a través de una transmisión en vivo por Instagram desde su casa.

El reconocido actor y conductor, Julián Weich fue internado en el Instituto Argentino de Diagnóstico y Tratamiento (IADT) el miércoles 14 de julio luego de una repentina complicación en su cuadro de coronavirus. Su médico personal Mario Fitz Maurice notificó que el conductor tuvo que ser trasladado a terapia intensiva y ser asistido por profesionales. Allí permaneció por más de una semana, y hoy, ya con el alta, se manifestó por primera vez en las redes sociales a contar su experiencia.

Con una transmisión en vivo desde su casa donde puso su cara en primer plano, sentado y hablando bajito, el conductor relató cómo fue su día a día en el Hospital. “Aquí estoy sano y salvo”, fue lo primero que dijo. “Me agarró un COVID-19 leve, donde no había ningún problema, y de repente ‘te ponemos un poquito de oxígeno en una bigotera para que te recuperes y vuelvas a tu casa’. Pero no volvés más”, recordó sobre las palabras que le dijeron los médicos cuando fue internado. Así sostuvo que fue “raro” el transcurso de su cuadro.

Por su parte, contó que en todo momento pudo estar con su teléfono celular, con el que se llamó al silencio en las redes sociales y decidió expresarse solo con sus seres queridos. “No iba a hacer un show de mi COVID-19, pero estaba al tanto de todo lo que estaba pasando”, aseguró e indicó que los mensajes que recibió ayudaron a su rápida sanación.

En cuanto a su vuelta al trabajo (conduce un programa con Carolina Papaleo en El Nueve) se tomará el fin de semana de descanso y no estará en el estudio, sino que hará alguna participación desde su casa a través de Zoom. “Cuando hablo mucho me agito”, explicó. A partir del lunes regresará “despacito”.

“Me pasaron miles de cosas estando internado mirando el techo”, continuó con su relató e hizo la salvedad: “Nunca la pasé mal, ni en una situación física, psíquica o emocional”. Su panorama clínico le llevaba tranquilidad, es por eso que en ningún momento sintió miedo o estuvo asustado. También se solidarizó con el personal de salud, que no dan abasto con los reclamos de la gente.“Todo mi apoyo y solidaridad con ellos porque son los héroes de esta actualidad”.

“Aclaro que no soy antivacunas. Al revés: me la paso promocionando la vacunación en mis programas, en mis redes. No fui por un problema personal. A los cuatro, cinco días, fui a colaborar con la Fundación Espartanos, supongo que fue ahí en donde me contagié, pero no lo puedo asegurar. Entonces, por más que me hubiera dado la vacuna, los anticuerpos no aparecen en dos minutos, tardan unos cuantos días, me hubiera contagiado igual”, consideró y retiró: “No soy antivacunas. Soy vegetariano, que no tiene nada que ver, pero antivacunas no soy”.

“Me tocó a mí, que yo me cuido, cumplo con todas las reglas y protocolos de convivencia sana que tenemos que mantener”, continuó y volvió a agradecer por el apoyo que recibió durante el tiempo que transitó su cuadro de coronavirus.

En tanto, concluyó la transmisión recordando una charla que tuvo con su compañera de radio sobre su experiencia: “Es como haber estado en tu propio velorio. Ves quién va, quién no va, quién saludó, quién no saludó. Es una situación rara, pero es como haber estado en tu propio velorio”.

“También me pasa que pienso en los que no tuvieron la chance de salir adelante. Eso me da bronca, pena, injusticia. Tenemos que honrar a todos los que no pudieron salir, cuidándonos a nosotros, vacunándonos, haciendo las cosas bien. Es un esfuerzo, es incómodo, sí. Algunos tienen más chances de hacerlo con más recursos, otros, menos, pero lo tiene que hacer. Por el bien de uno, de la familia y de la sociedad”, cerró Julián Weich.