Un violento hombre de Rincón de los Sauces, provincia de Neuquén, recientemente acusado por agredir a su pareja, había intentado matar a la mujer dos meses antes. La víctima, presa del círculo de violencia, no quiso avanzar con su denuncia y eso le había otorgado la libertad. El abogado querellante que la patrocina afirmó que se la está acompañando para, tras la nueva formulación de cargos, poder llegar a juicio.
El último hecho ocurrió esta semana, cuando el hombre de esa localidad quedó detenido tras agredir y ejercer violencia contra su pareja, a quien no se podía acercar por orden de la Justicia.
Es que, según pudo conocer LM Neuquén, el violento agresor es quien fue acusado por intento de femicidio contra la mujer por el hecho acaecido el pasado 8 de marzo, alrededor de las 13:30, en la vivienda donde convivía la pareja con su pequeño bebé de 9 meses, cuando compartían un almuerzo con otras personas y, “en el marco de la charla, se produjo una discusión”.
La fiscal Rocío Rivero indicó durante la audiencia de formulación de cargos que el hombre “comenzó a insultar a la mujer, a agredirla con golpes de puño en la cara” y, finalmente, le lanzó “un cuchillo grande de cocina” en el pecho, causándole una lesión en el tórax, por lo que fue trasladada a la clínica local. De casualidad, el arma no llegó a afectar órganos vitales.
A raíz de esa acusación y con el fin de proteger a la víctima y resguardar la investigación, el agresor quedó tras las rejas, pero dicha medida fue morigerada sólo un mes más tarde por pedido del defensor José Quintero.
El elemento principal que entró en juego y permitió este cambio a favor del acusado fue que la víctima comenzó a retractarse de su relato y a restarle gravedad, llegando a manifestar no querer avanzar con la causa, sumado a los dichos de un testigo que afirmó que no había sido un hecho de violencia, sino que se había tratado de un accidente.
Por este motivo, el asistente letrado de la fiscalía, Pablo Javega, respondió ante el pedido del defensor que su plataforma fáctica se vio debilitada, y no se opondrían al mismo. Aún así, sostuvo que se sometería a la mujer a una entrevista con una psicóloga del gabinete del Poder Judicial para asegurarse de que su relato no estuviera viciado por la violencia de género a la que era sometida.
En esas circunstancias, el juez Lucas Yancarelli otorgó la libertad al violento, supeditada a otras medidas cautelares para resguardar a la víctima. Sin embargo, un mes más tarde, puntualmente el domingo pasado, la mujer volvió a sufrir hechos de violencia por parte del sindicado.
“Aparentemente ella estaba sobre una moto, pese a la prohibición que él tenía de acercamiento, la tiró de la moto y la lesionó. Y ella no quería efectuar denuncia alguna, por eso intervino el Consejo de la Mujer”, confió el abogado Marcelo Hertzriken Velasco, quien interviene como querellante en representación de la mujer.
Indicó que luego del hecho del 8 de marzo, la víctima estaba totalmente sumergida en un estrés postraumático, y por ello se le brindó contención de inmediato. Sin embargo, opinó que la morigeración de la cautelar que benefició al violento al mes siguiente, no debería haber ocurrido y sus consecuencias podrían haber sido incluso mucho más graves.
“No fue una buena decisión morigerar la cautelar sin un informe que lo avale. Creo que este es un caso absolutamente emblemático de la vulnerabilidad de la mujer en estas circunstancias, que más de una vez no quieren denunciar, quieren levantar las medidas de prohibición y otorgarles voluntariedad a esos actos cuando son el resultado de la violencia”, expresó, explicando así por qué es tan fundamental la intervención de los organismos del Estado en conjunto al perseguir estos hechos.
En el marco del último hecho, la fiscalía formuló cargos nuevamente contra el agresor, esta vez por lesiones leves doblemente calificadas por el vínculo y por el contexto de violencia de género, y volvió a detener al violento por reincidente, ante el peligro de fuga y entorpecimiento.
El querellante indicó que se pretende continuar con el asesoramiento y acompañamiento a la joven desde lo legal y también desde el municipio y el Consejo de la Mujer, y se pretende llevar al violento a juicio.
LMN
