«Productos que no cumplían con las normas y la reglamentación de sanidad» para el manejo de alimentos, indicaron desde la Municipalidad de La Matanza.

El Municipio de La Matanza informó que la clausura de la sucursal de la avenida Rivadavia de la localidad de Ramos Mejía de la cadena argentina de supermercados COTO se realizó por cuestiones de higiene y bromatológicas. «En la inspección de rutina desarrollada constató la presencia de productos que no cumplían con las normas y la reglamentación de sanidad», indicaron voceros del intendente Fernando Espinoza.

Fuentes de la sede comunal ubicada en Caseros, indcaron que «entre otras irregularidades, se detectaron productos con fecha de vencimiento manipulada, productos sin la pertinente refrigeración, mal manejo de residuos, falta de limpieza en espacio donde se manipulan fiambres, quesos y carne, sangre de carne picada cayendo sobre tortas y productos de repostería, lo que lleva a un potencial riesgo de contaminación cruzada de alimentos».

«Además, se constató que varios productos excedían los topes máximos de precios exigidos por el Estado nacional. Por este motivo, el personal a cargo de la inspección dio aviso inmediato a la Secretaria de Comercio de la Nación», indicaron.

La Matanza espera que se realice la desinfección y se cumpla con las reglamentaciones bromatológicas. «Especialmente en momentos en los que la pandemia exige que las condiciones de limpieza y desinfección sean ejemplares», subrayaron.