Al regresar de su descanso del fin de semana largo, el presidente Mauricio Macri recibirá a su par de Bolivia, Evo Morales.

Lejos de la buena sintonía que existía durante la gestión de Cristina Fernández de Kirchner, la visita se realizará en medio de las tensiones con el país vecino producto de la prestación de servicios de salud a ciudadanos argentinos y los cruces con el gobernador oficialista de Jujuy, Gerardo Morales.

Según adelantó la Cancillería nacional, se discutirán “cuestiones fronterizas, la continuidad de los contratos sobre comercialización de gas y la situación política que se desarrolla en Venezuela”. Sobre éste último punto, ambos países mantienen también importantes diferencias ya que la Argentina está alineada con Estados Unidos en la política de confrontación con el gobierno venezolano de Nicolás Maduro.

El mandatario extranjero participará el domingo de un acto con la colectividad boliviana en el municipio de La Matanza.

El encuentro de presidentes se producirá el lunes a las 12 en la Casa Rosada. La relación entre ellos es tan mala que la última visita de Evo Morales a Buenos Aires, en 2018, transcurrió sin que ambos se vieran las caras.

Ahora Morales llegará para cerrar un acuerdo de “reciprocidad” en la atención de Salud de los no residentes. El convenio produce luego de un conflicto diplomático generado a principios de este año por el gobernador radical, cuando un ciudadano jujeño tuvo que pagar por atenderse en un hospital público de Bolivia con motivo de un accidente vial.

En aquel momento, la ministra de Salud boliviana, Gabriela Montaño, le respondió que “no hubo ningún tipo de discriminación” y que la atención que recibió fue la misma que le correspondería a un ciudadano boliviano, dado que su país no cuenta con un sistema de salud universal y gratuito como el nuestro. Según trascendió, en las negociaciones estuvieron involucrados diplomáticos de ambos países y el secretario de Salud argentino, Adolfo Rubinstein, entre otros. El convenio contemplaría la atención gratuita en casos de emergencia sanitaria y en prestaciones de salud de alto riesgo.

Otro tema potencialmente problemático es la renegociación de los contratos de gas. Se ratificará el acuerdo para la provisión hasta 2026 pero el gobierno argentino busca generarse un ahorro de 460 millones de dólares en base a un nuevo esquema de precios y entregas elaborado por la Secretaría de Energía que encabeza el ex vicejefe de Gabinete, Gustavo Lopetegui.

Como parte de estas tratativas, la Argentina le ofreció a Bolivia una provisión de aviones Pampa III, elaborados en la fábrica Fadea, y que el país vecino utilizaría para vigilar sus fronteras ante la amenaza del contrabando y el narcotráfico. Es por eso que tras el encuentro, Macri y Morales tienen previsto trasladarse a la base aérea de El Palomar para supervisar estos aviones.

En cuanto a la cuestión regional, la situación de Venezuela será otro de los puntos que abordarán ambos presidentes. Macri fue uno de los primeros en reconocer a Juan Guaidó como “presidente encargado” de ese país, mientras que Morales lo calificó como una suerte de “virrey colonial” y repudió la intervención estadounidense. “En democracia, los pueblos libres eligen a sus presidentes, no el imperio. América Latina es una zona de paz y defenderá su soberanía”, dijo en enero de este año y remató: “Nunca más vamos a ser el patio trasero de Estados Unidos”.