La batalla de Oroquieta fue un enfrentamiento entre carlistas y liberales durante la Tercera Guerra Carlista. El pretendiente carlista Carlos VII fue derrotado y a punto estuvo de ser capturado, teniendo que huir del país, dando así tiempo para crecer a la nueva insurrección, ya que ésta había quedado prácticamente desmantelada tras la batalla.
El 21 de abril de 1872 se produjo el levantamiento carlista que daría lugar a la tercera guerra de este nombre.
En el País Vasco y Navarra el levantamiento atrajo a la mayoría de la población, pero los militares carlistas, en vez de agrupar a los voluntarios que se presentaban, dejaron que éstos recorriesen la región sin ningún orden y en grupos de más de mil personas (varones y también mujeres), que estaban mayormente desarmados.
El pretendiente cruzó el dos de mayo la frontera, antes de haber dado tiempo al creciente ejército a aumentar y expandirse por el territorio vasco-navarro, quedando pues muy inseguro.
El general Serrano, viendo que don Carlos marchaba junto a su exigua tropa en completo desorden, mandó a Domingo Moriones el ataque. A pesar de que su ejército era numéricamente inferior, estaba bien armado y provisto de artillería.
El 3 de mayo se aproximó a Oroquieta, al día siguiente atacó la localidad navarra. La batalla pasó a la historia como el desastre de Oroquieta.
Coincidente con el nombre, ese hecho histórico y este apellido del funcionario que maneja las riendas del área de seguridad en nuestro municipio, tienen más puntos en común además del nombre.
Dario Oroquieta fue designado por su amigo de años y ex compañero en materia de seguridad e inteligencia Guillermo Montenegro cuando el jefe comunal tuvo asegurado el triunfo en las últimas elecciones del 2019.
Con un pasado digno de destacar, este residente del gran Buenos Aires que cumple funciones hoy en General Pueyrredón proviene del riñón de la ex Ministra Patricia Bulrich.
Fue nombrado por Mauricio Macri días después de asumir la presidencia
Trabajó junto a la versión más represiva y retrograda de la alianza gobernante hasta el año pasado, jugando un papel preponderante en aspectos de Seguridad y su vínculo con la Gendarmería. Además, trabajaba de temas relacionados con la inteligencia, tan visibilizado hoy por los escándalos de espionaje ilegal, en donde el actual funcionario municipal estuvo involucrado.
«El jueves pasado declaró durante varias horas ante los legisladores el ex espía Horacio «el turco» Saez y dejó muy mal parado a Arribas: contó que Dalmau Pereyra renunció en 2018 porque le pidió seguir a políticos para las elecciones y no lo aceptó. Logró traslado a la embajada de Chile.
Saez describió detalles de las persecuciones a Pagni y a otros periodistas como Hugo Alconada Mon, de La Nación; y Rodis Recalt, de la revista Noticias. «Un día viene Alan Ruiz y me dice: ‘Escúchame, tenemos que trabajar porque tengo orden de la 8 que tenemos que seguirlo Alconada Mon'», relató.
Compartía tareas con Leandro Araque, otro ex agente que declaró hace una semana. Le anticiparon que se venían causas penales muy comprometidas contra Pangi y Alconada Mon, quien en 2017 denunció a Arribas por tener una cuenta en Suiza que nunca supo explicar.
El Turco describió el seguimiento a «los gastos» de Santilli y contó que llegó a la AFI a través de Darío Oroquieta, a quien mencionó varias veces como a «un amigo de Ruiz» de cuando integraban la policía metropolitana en la época de Macri como jefe de Gobierno»
Antes de todo esto, y cuando Macri no era Presidente y la ciudad de Buenos Aires fue el bastión para su lanzamiento a nivel nacional, Oroquieta trabajó junto a Montenegro y otras personalidades destacadas en la creación de la policía metropolitana, temas de seguridad e inteligencia en el ámbito capitalino.
También allí hubo escuchas ilegales y demás juegos de la vieja y sucia política, archivados rápidamente por fiscales y el ministro de seguridad porteño de ese momento. El mismo amigo que lo ungió responsable de seguridad del municipio.
El dilema de como cubrir tantos puestos de funcionarios que se requerían para tres estados (Nación, Provincia y Ciudad de Buenos Aires) tras las elecciones en 2015, cuando este sector político solo gobernaba el distrito porteño, con la derrota del 2019 se produjo el efecto inverso (¿Adonde ponemos tantos funcionarios?) más cuando Rodríguez Larreta fue claro: «No puedo en Buenos Aires cobijar a todos». Allí empezaron desde el vidalismo a garantizar lugares en distritos en donde el PRO había triunfado. Hombre de ella, Montenegro ni dudó en poner a su amigo y otros funcionarios que tuvieron rangos municipales, provinciales, nacionales y, manito de por medio, volver al barro de los municipios.
Aquí cabe detenerse en un aspecto. El actual jefe comunal prometió, sostuvo y reiteró que ubicaría en cada área a gente «Con experiencia y conocimiento de la realidad de los marplatenses». Archivo mata realidad.
Volviendo al hombre de la nota, Oroquieta comenzó ejerciendo funciones de seguridad en Vicente Lopez. Bien podría haber aterrizado allí, zona norte de la provincia que conoce un poco más que la zona céntrica de nuestro municipio. Pero viejos cortocicuitos con el primo del apellido famoso impidieron su nombramiento, a pesar de haber logrado importantes avances en ese distrito.
Finalmente recayó en Mar del Plata, diciendo que la conocía bien ya que estuvo en varias oportunidades y trabajó para la llegada de gendarmes al municipio.
Oroquieta trabaja con Guillermo Montenegro desde hace más de 12 años, y junto a Eugenio Burzaco formaron la Policía Metropolitana.
Un C.V. de lujo para cualquier municipio como:
-Fue el responsable operativo del despliegue de las fuerzas federales durante el operativo del G20 y otros eventos internacionales.
-Creó el CUFRE (Comando Unificado Federal de Recaptura de Evadidos) que logró la recaptura de más de 11 mil prófugos y también un área de Bienestar de las Fuerzas Federales.
-Secretario de Seguridad de Vicente López, gestionada por el primo Macri de la política, donde creó la Patrulla municipal, el centro de Monitoreo y fue premiado a nivel internacional por la creación de un sistema de alerta vecinal.
-Hombre de confianza de la ex ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, con quien también conformaron la mesa de operaciones conjuntas entre fuerzas federales y policías provinciales y la incidencia de Gendarmería en el territorio Nacional y el objetivo y trabajo operativo que tuvo esa fuerza durante los anteriores cuatro años.
Un pasado pleno de logros. Siempre vinculado a la inteligencia, con buena relación tanto en Gendarmería como fuerzas provinciales y nacionales de seguridad. Además, llegada en su momento a los servicios de inteligencia mencionados anteriormente.
El Desastre de Oroquieta estuvo plagado por un profundo desconocimiento del terreno y lo que se avecinaba; repitiendo errores y métodos en escenarios diferentes e inoperancia a la hora de poder dar respuestas operativas en un lugar que se desconocía.
Oroquieta mantiene en forma viviente su gestión con ese paralelismo histórico que realizamos. Desconoce el Municipio, sus calles y barrios profundos, no tiene política para Batán, falló en el armado y contralor de los retenes y sólo se concentra en las cámaras de COM sin tener una convivencia diaria con nuestras barriadas.
Cientos de vecinos y vecinas se quejan de la inoperancia en horarios y turnos de algunos retenes. Muchos más son los que se quejan de la ausencia de cobertura de seguridad en los diferentes barrios de nuestro municipio.
María Lopez se queja del robo, después de hacer tres veces la denuncia, de 15 caballos en el Barrio Pueyrredón. Asaltos a remiseras y remiseros en barrio la Zulema, Libertad, Faro, entre otros. Ola de robos en Serena, Acantilados y barrios del sur. Faro Norte fue ayer testigo de como golpearon a la mamá de Lucía Bernaola. Los casos se multiplican en todo el territorio del municipio a diario.
El desconocimiento que tiene profundiza su inoperancia. La pandemia tapa muchas de estos hechos y el cerco mediático colabora para aliviar la situación del funcionario.
Ignorancia del territorio y ponerse en piloto automático MATA CURRICULUM.
Con seis meses y medio de gestión cabría preguntarle a los vecinos si sienten algún cambio en materia de seguridad en nuestro municipio en relación a la gestión anterior. Los consultados en sociedades de fomento, clubes barriales, merenderos y comedores barriales no perciben sentirse más seguros. Abundan los pedidos por MAYOR INSEGURIDAD en General Pueyrredon.
El Desastre de Oroquieta se verá con mayor claridad pospandemia, cuando la agenda se concentre en los aspectos locales y todo lo que se pide y denuncia hoy, se potencie mañana.
Mientras tanto, los marplatenses y batanenses siguen reclamando por algo tan importante como es estar seguros y percibir que las fuerzas de seguridad están activas, previniendo, controlando y cuidando a los habitantes.