Los escándalos vinculados al accionar de la cadena de supermercados Coto durante la pandemia de coronavirus, no se detienen. A la cifra escalofriante de 100 contagios en distintas tiendas del AMBA, y las denuncias de los trabajadores sobre el incumplimiento de protocolos y aprietes a quienes hacen reclamos, en las últimas horas se sumó un lamentable y violento episodio.

Tras confirmarse 10 casos positivos de empleados de la sucursal Lanús Oeste, en las últimas horas se viralizó un increíble video, Según publicó el medio especializado en temas gremiales, Gestión Sindical, en las imágenes se puede advertir a Eduardo Búfalo, gerente de Operaciones de la empresa, amenazando a personal de la Municipalidad para impedir el cierre de la tienda.

Uno de los agentes grabó con su celular la escena del mercado ubicado en Rivadavia 2602. “¡Hoy voy en cana! Esto termina mal. ¡No van a cerrar la sucursal, Tito!”, se lo escucha decir a Búfalo, quien dirigiéndose al empleado municipal de manera intimidante, continuó: “¡No la vas a cerrar, como que me llamo Búfalo!”. Mientras, el inspector pide que no le grite y que lo trate con respeto.

A través de un comunicado, esta mañana el Sindicato de Empleados de Comercio de Lanús y Avellaneda (SECLA) confirmó los 10 casos positivos y aclaró que se cerraron solamente los sectores del local donde se detectaron los contagios: “Carnicería” y “Centralizados”. El resto de la tienda –tal como pudo constatar ese medio, permaneció abierta durante la jornada de este domingo.

El texto del SECLA agrega que no se descarta “la posibilidad del cierre de la sucursal de manera completa, si surgen más casos positivos de Covid-19 en los próximos días”. Por último, el sindicato informó que hay otros 48 los trabajadores de los sectores mencionados, que se encuentran aislados en sus casas y en observación, a la espera del resultado de los hisopados.

En tanto, los empleados de la sucursal 75 de Coto denuncian que en realidad “son más de 10 los casos positivos” de Covid-19 en esa tienda de Lanús y advirtieron que la patronal “aprieta” al resto de los trabajadores para que sigan prestando servicio en la tienda. Además, personal infectado denunció por Twitter que estuvieron más de 24 horas en el piso, durmiendo en los pasillos por falta de camas.