Hace algunos años atrás, no muchas personas conocían este tipo de cervezas y mucho menos se animaban a comenzar a producirlas. En la actualidad, aparecen cada vez más cocinas por todas partes, casi como si fuese la nueva cancha de paddle, pero esta vez en un mercado que parece tener mucho más futuro, ya que en los pocos años que está en su boom, parece que nada lo puede detener.

Es que si bien este tipo de producto está muy lejos de sobrepasar a la producción y ventas de cerveza industrializa, cada vez más argentinos se están volcando a este producto, que resulta mucho más refinado, con mayores contrastes y sobre todo mayor calidad. Sucede que no hay nada como el trabajo de un artesano, y eso es lo que las diferencia de las demás, la capacidad de ofrecer un producto que tiene más producción detrás, al que suele prestársele mucha más atención y que resulta también más atractivo.

Si bien es algo que recién está comenzando en nuestro país y que está dando pasos agigantados, en países como los Estados Unidos y muchos de los de Europa, es un fenómeno que viene pegando fuerte hace ya bastante tiempo. Es por eso que muchos turistas de esos lugares se notan sorprendidos, pero bien, por esta nueva moda que llegó para quedarse entre los argentinos, ya que aquellos que la prueban no pueden volver.

Los tipos más populares

Existen una gran cantidad de tipos de cerveza, pero a grandes rasgos hay dos grandes ramas de las que derivan todas las demás. Los ale que son cervezas de cuerpo más pesado y contrastes de sabores mucho más profundos, mientras que las lager son más delicadas, más refrescantes e ideales para aquellos que se están introduciendo en este mundo.

Sumando productos regionales, muchos maestros cerveceros están creando sus propias variantes, incluso llegando a conseguir grandes premios a nivel internacional. La cervecería Astor Birra de La Plata fue premiada como la mejor del país, luego de evaluar entre muchas otras cosas la calidad de sus productos, mientras que la cerveza Session Ipa de Beata (Buenos Aires) fue coronada como la mejor cerveza del país. Estos son dos testimonios del creciente mercado en Argentina que al cierre de esta edición parece no tener ánimos de detenerse.