La ministra de Desarrollo de la Comunidad bonaerense explica la importancia del aumento en la inversión de asistencia alimentaria y el valor de la escuela: “Sigue siendo el sostén y la referencia”.

La ministra de Desarrollo de la Comunidad bonaerense, Fernanda Raverta, anunció en la víspera junto al gobernador Axel Kicillof y la ministra de Educación, Agustina Vila, un aumento significativo para el Sistema Alimentario Escolar (SAE) en el marco de la emergencia sanitaria por el coronavirus. La medida implica un incremento de casi tres veces en el monto mensual que la Provincia había realizado en marzo.

En concreto, se destinarán 2600 millones de pesos (137 por ciento más con respecto al mes anterior) para la asistencia alimenticia de 1,7 millones de chicos y chicas de entre 6 y 18 años que forman parte de las más de 10 mil escuelas bonaerenses.

En diálogo con Ámbito Financiero, Raverta explica que “elegimos que la forma en la que queremos que entre la comida a la casa sea a través de los chicos y chicas y por medio de la escuela, porque la escuela sigue siendo un lugar donde el estado está representado ya que todos los barrios tienen su referencia ahí”.

Periodista: La comida en la escuela suele ser en muchos casos el único alimento diario que reciben los chicos. ¿Cómo se llevará cabo la entrega para asegurarse de que todos tengan su bolsón?

Fernanda Raverta: La entrega de los alimentos se realizará en las escuelas a través de bolsones que podrán ser retirados cada quince días. Son muchos los chicos que a diario desayunan o almuerzan a través del SAE. Lo que hicimos fue universalizarlo. Antes almorzaban menos y desayunaban más. Ahora todos recibirán lo mismo. De esta manera nos aseguramos que los chicos tengan los componentes nutricionales básicos para su alimentación. Cada uno tendrá un bolsón valuado en 750 pesos, por lo que recibirán 1500 pesos de alimentos mensuales.

P.: Esta emergencia sanitaria impacta de lleno en los sectores más vulnerables quienes se ven imposibilitados de generar ingresos por la cuarentena. ¿Con esta acción, más las nacionales, creen que cubren el ingreso necesario para este momento?

F.R.: El gobierno provincial y el nacional hicieron transferencia de dinero a las familias más vulnerables. En la provincia hay 1500 villas, lo que significa más de 2 millones de personas. En este marco, sabemos que hay 5 millones de personas debajo de la línea de pobreza y tenemos que asistirlos en términos de emergencia económica y social bajo un marco de emergencia sanitaria. De 0 a 6 años está la Tarjeta Alimentar que dispone de 4 mil pesos si tenés un hijo y de 6 mil si tenés dos. De 6 a 18 años nos toca a nosotros. Y sabemos que la comida que entra a la casa es para todos. El valor está en que sea a través de los chicos. Es la importancia de poner el acento en ellos porque la escuela sigue siendo el mejor lugar para que estén los nenes y las nenas. Sigue siendo el sostén.

P.: ¿Cuál es el rol de los docentes en este marco de entrega?

F.R.: Instrumentar todo esto fue posible justamente gracias a que hay docentes y auxiliares que apostaron a esto. Y son ellos los que cada 15 días, cuando los padres retiren los bolsones, tendrán la oportunidad de ver cómo está cada familia. La solidaridad de los docentes es clave porque nos permite tener la mirada del estado en cómo transcurren la cuarentena.

P.: ¿Cómo viene actuando el Comité de Emergencia Social?

F.R.: Tiene un rol muy importante porque nos da la posibilidad de construir una inteligencia común con diferentes actores como el ministro de Desarrollo la Nación, intendentes, organizaciones sociales y la Iglesia. Multiplicamos la información y la conciencia para evitar que la emergencia sanitaria termine en una crisis. Tomamos nota de lo que pasó en otros lugares y sabemos lo que tenemos que hacer para cuando se ponga más complicado. Todos aportamos. No tenemos la clave del éxito, estamos preparados”. Cuando el presidente dice que dios nos dio tiempo, se refiere a eso. A que cada uno de nosotros ya sabe cuál es su rol.

P.: Había muchas dudas de cómo se llevaría adelante el aislamiento en los barrios. ¿Le sorprendió el resultado?

F.R.: Fue una respuesta no muy esperada por muchos. Se fue dando muy bien. Se trata de una acción muy responsable porque en algunos lugares el asilamiento es muy difícil. Lograr atravesar este tiempo con dificultades sociales y económicas no es fácil y lo vienen haciendo.

P.: ¿Se revaloriza la política en estos momentos?

F.R.: Siempre confié en la política como ámbito para tomar decisiones para el bien común. Es un momento de la historia que requiere que estemos unidos. Tenemos que construir una síntesis. Nadie se salva solo. Hay que saber cuidarse uno y también a los demás. No reparo en los que especulan. Correr contra el tiempo requiere que pongamos la energía para que esto sea lo menos dolorosamente posible.

Por Bruno Lázzaro-AMFIN