Una vez más Lionel Messi aportó su magia para solucionar todo. Cuando PSG no podía como local ante el Lille en partido correspondiente a la Liga francesa, el mejor futbolista del siglo ejecutó con maestría un tiro libre en tiempo de descuento y le dio el triunfo a los suyos por 4 a 3.

El elenco parisino, que venía de perder dos partidos seguidos ante el Marsella por Liga y el Bayern Munich por Champions, estuvo 2-0 al frente en el primer tiempo pero Lille lo había llegado a dar vuelta en el complemento y se había puesto 2-3. Mbappé, que convirtió dos goles (el otro lo hizo Neymar) había puesto el 3-3 y Messi, con un zurdazo de ensueño que dio en la cara interna del palo y se metió, estableció el 4-3 definitivo para el líder de la Liga francesa.