Ante las denuncias de directivos y docentes de numerosas escuelas de la ciudad sobre el pésimo estado de los alimentos para los comedores y la poca cantidad que llegaron a los establecimientos el lunes 30, desde Unidad Ciudadana realizaron una resolución para repudiar este hecho.
«Este martes nos reunimos para manifestarnos en contra de esta desidia hacia la educación pública. Mientras que en algunas escuelas recibieron 23 paquetes de fideos para más de 150 estudiantes, en otras tuvieron una bolsa de mandarinas o 5 kilos de pan para 250 nenes/as», remarcó la edil Marina Santoro.
«Nosotros seguimos denunciando que esta es una cuestión política y que es una decisión de esta gestión abandonar la escuela pública. En el Consejo Escolar hay una autoridad de facto que vino a intervenir y no resolvió ninguno de los problemas de las escuelas, sino que los empeoró, como en este caso», se lamentó la concejala.
Además, agregó: «Esto es parte de una situación general de la gestión Cambiemos, que afecta a la educación, pero también a la salud, la cultura y otros ámbitos. En particular, este recorte de la Provincia afecta a los pibes más vulnerables que son los que tienen que pagar estas políticas».
El Servicio Alimentario Escolar (SAE) está dirigido a niños y adolescentes en situación de vulnerabilidad social escolarizados en la educación pública de la provincia con el objetivo de garantizar una cobertura nutricional.
En ese marco, el bloque de Consejeros Escolares de Unidad Ciudadana expresó su preocupación porque las escuelas “no están recibiendo la mercadería para dar el plato de comida diario a los alumnos y no parece tener una solución en el corto plazo”.
El SAE tiene una dimensión de más de 42 mil prestaciones diarias entre Desayuno y Merienda Completo (DMC) y Comedor. “Hoy los chicos están pasando hambre en las escuelas porque la comida no llega y para muchos significa el único plato de comida en el día, por lo que se hace prioridad la necesidad de restablecer un buen servicio cuanto antes”, señalaron desde el bloque.
“La situación es muy grave, la mercadería no sólo no llega en tiempo y forma, todo es de terceras marcas y las cantidades no tienen relación alguna con los cupos que tiene asignado cada escuela”, explicó el consejero Alejandro Moviglia y agregó “los remitos que el proveedor le quiere hacer firmar a los directivos no cuentan con el detalle de precios ni cantidades y, como si fuera poco, mencionan mercadería no presente”.
Por su parte, la consejera Claudia Freije aseguró que “es escandaloso lo que está pasando, el reparto se está realizando a través de vehículos no preparados, sin refrigeración, por ejemplo nos encontramos con que enviaron pollo en un remís” además contó que “la provincia ha privilegiado negocios con empresas amigas por sobre las necesidades que tienen los estudiantes con muchísimo daño para las escuelas”.
Por último, lejos de culpabilizar únicamente a los proveedores de Blue Catering, del grupo L, y Agropecuaria Ancor SRL, la presidenta del bloque Eva Fernández aclaró que “desde que desembarcó la intervención estamos reclamando por mayor apertura a la participación y sobre transparencia” y apuntó a las responsabilidades políticas: “La gobernadora Vidal es la cabeza de estas operaciones que se repiten en la provincia, el presidente de consejos escolares Marcelo Di Mario estuvo en el distrito asegurando el trámite y el interventor Marcelo López no sabe dar ninguna respuesta mientras le pide a los directivos que le pongan buena onda”.