Pese a la resistencia de un grupo de vecinos de Nordelta, que hoy abandonó el recinto del Concejo Deliberante de Tigre insultando a los concejales de Cambiemos al grito de “traidores”, se aprobó por unanimidad el proyecto de ordenanza presentado por el intendente Julio Zamora para que el colectivo 723 ingrese a la troncal pública que comunica a los distintos barrios del megaemprendimiento inmobiliario. Sin embargo, el colectivo no podrá ingresar inmediatamente, como estaba previsto, dado que al proyecto original se agregaron dos artículos que establecen un plazo de 60 días –que podrá extenderse por 30 más– para que se adapten “las medidas necesarias tendientes a la efectivización del servicio descrito en la siguiente ordenanza”.

“Ese plazo es para continuar dialogando con la gente de la Asociación Vecinal de Nordelta (AVN), para que se puedan generar las medidas de seguridad necesarias y de esta manera los vecinos no sientan ningún abandono por parte de la gestión”, explicó Roxana López, concejala de Unidad Ciudadana.

Mientras dure ese plazo, los trabajadores de Nordelta continuarán viajando en el servicio de combis privadas MaryGo, que el mes pasado fue denunciado por un grupo de empleadas domésticas por no querer llevarlas debido al pedido de un grupo de vecinos que no quiere compartir sus asientos con ellas porque “tienen mal olor y hablan mucho”.

“El transporte, hasta mediados de marzo, se va a seguir garantizando con MaryGo. Al menos esos nos informaron. Nosotros nos vamos a acercar al Ejecutivo municipal para hacer pedidos de informe, porque como ediles y representantes del pueblo es nuestra responsabilidad saber cómo se va a llevar adelante esto”, informó López.

Si bien un grupo de vecinos de Nordelta, con el que vienen dialogando los distintos bloques del recinto, estuvo de acuerdo con el proyecto aprobado, que contempla un plazo para que se tomen las medidas de seguridad necesarias ante el inminente ingreso del transporte público, otro grupo sigue oponiéndose por considerar esta medida el “fin de la paz y la tranquilidad” en los barrios. “Se vivieron momentos de mucha tensión con esos vecinos que no estaban de acuerdo. Cuando la presidenta del Concejo especificó los detalles del proyecto, ellos se levantaron y se fueron, insultando a los concejales de Cambiemos, a quienes tildaron de traidores por ‘haberlos abandonado’”, contó la concejala.

P12