El Gobierno anunció este martes el cierre de otros dos organismos y la decisión de echar a 900 empleados, al tiempo que prepara el cese de miles de contratados del Estado, cuya situación fue puesta “a revisión”, y sus vínculos vencen a fin de mes.

En medio de su plan de reducir al máximo posible la planta de empleados públicos, que ya incluyó al INADI, a la agencia de noticias Télam y el ex Ministerio de la Mujer, ahora la administración de Javier Milei dará de baja el Instituto de Agricultura Familiar, Campesina e Indígena (Inafci) y el Consejo Nacional de Agricultura Familiar.

La decisión fue anunciada por el vocero presidencial Manuel Adorni en su habitual conferencia de prensa desde la Casa Rosada. Según precisó, esos organismos se van a transformar en “una dirección con 64 empleados. Se reducen 900 puestos de no trabajo y va a significar un ahorro de 9.000 millones de pesos”.

“El Ministerio de Economía ha decidido avanzar con la eliminación del Instituto de Agricultura Familiar, Campesina e Indígena y el Consejo Nacional de Agricultura Familiar. Luego de una revisión de datos calamitosos y profundamente desoladores, estos institutos tenían un total de 964 empleados”, precisó el portavoz.

Además, aportó más datos para que, según señaló, se tome “dimensión de la fiesta que había de gasto público”. “Además de los 964 empleados tenía 160 delegaciones, dos sedes, uno de cada tres empleados eran delegados, tenía 204 vehículos y el 85% el presupuesto se dedicaba a pagar sueldos”, sostuvo.

No obstante, el Gobierno mantiene en estudio el cese de miles de puestos de trabajo en el Estado. Son aquellos que tienen contratos y que se vencen el 31 de marzo. Y que, en muchos casos, ya recibieron alguna comunicación extraoficial sobre que no se les renovará el contrato.

Si bien los rumores hablan de miles de despidos, desde el Gobierno lo limitaron a los contratos que se renovaron en enero, por tres meses, pero que estaban bajo estudio. Además se analiza todos los casos de aquellos que no están en planta permanente.

Según los datos de ATE, son hasta 70.000 los empleados bajo ese régimen que brindan servicio ante la administración pública nacional sobre la que Javier Milei tiene control. En las últimas entrevistas el Presidente se jactó de ya haber “echado a 50.000 empleados públicos” pero lo cierto es que eso todavía no ocurrió. (DIB)