El presidente chileno, Gabriel Boric, condenó enfáticamente la violencia y las violaciones a los derechos humanos que se instalaron en Chile desde el golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973, hace hoy 50 años, al cerrar el acto de conmemoración de ese hecho, en el que murió el presidente socialista Salvador Allende.

En la enorme carpa instalada en la céntrica Plaza de la Constitución, frente a Palacio de La Moneda, el joven mandatario se dirigió especialmente a las nuevas generaciones, a las que convocó a mantener viva la memoria y ejercer un futuro en el que “que nunca más la violencia sustituya al debate democrático”.

Sobre el manifiesto “Por la Democracia” que el actual mandatario firmó junto a los expresidentes vivos del país, Boric dijo que lo valora “profundamente”, porque “esa es la diversidad entre quienes piensan distinto, con quienes podemos construir una sociedad mejor”, dijo levantando la voz luego de mencionar a Sebastián Piñera y que comenzaran a escucharse abucheos del público.

“Hoy conmemoramos una fecha que es dolorosa y sin duda un punto de inflexión de nuestra historia”, dijo Boric. “Una historia que trajo muerte, sufrimiento, persecución y pobreza”, recordó.

“Que nunca más la violencia sustituya en nuestra convivencia al debate democrático y hoy decirles ante Chile y el mundo: Democracia hoy y siempre”, insistió Boric.

En su discurso, Boric indicó que, pese a los problemas que se deberán enfrentar, se considera un “optimista sobre el futuro de Chile y América Latina”.

Para ello, consideró esencial ejercer la defensa de los valores democráticos, que constituyen el debate respetuoso y la escucha ante las diferencias.

“Podemos salir adelante cuando somos capaces de poner el bienestar de nuestros pueblos por sobre nuestras indiferencias”, expresó.

“La democracia es el único camino para avanzar en una sociedad más justa y humana; es un fin en sí mismo y la violencia política no cabe dentro de ella”, insistió.

“Pertenezco a una generación que no vivió el golpe de Estado. Así como yo, la mayoría de los chilenos que habitan nuestra tierra, nacimos después del 11 de septiembre de 1973 ¿Qué sentido tiene entonces rememorar algo que pasó hace 50 años? Quiero que entendamos que el sacrificio de quienes nos antecedieron en la larga historia de nuestra patria nos interpela a cuidarla día a día”, dijo el mandatario, de 37 años.

“Ni el mundo ni un país parten nunca de cero, somos siempre herederos de lo que construyeron nuestros antecesores y debemos ser capaces de aprender de sus luces y sombras”, indicó Boric.

“Hoy tenemos la verdad y la responsabilidad de afrontar lo sucedido en esos años con verdad, justicia y reparación. Asumiendo las deudas del pasado y reparando esas heridas, será posible una convivencia en armonía y la construcción de una sociedad que se proyecte humanamente hacia el futuro”, dijo.

Y resaltó: “Ni el mundo ni un país parten nunca de cero, somos siempre herederos de lo que construyeron nuestros antecesores y debemos ser capaces de aprender de sus luces y sombras”.

“Lo que pasó en Argentina, lo que pasó en Uruguay, en Chile, le debe doler a los que les pasó y a los que no les pasó, porque al final del día somos una comunidad, por eso también nos duele el dolor de otros países”, subrayó.

“La unidad y reconciliación no se consigue con neutralidad y distancia, sino que poniéndose del lado de quienes fueron víctimas del horror”, remarcó Boric.

Recordando lo que han avanzado gobiernos anteriores en materia de detenidos desaparecidos, Boric indicó que su gobierno “pretende dejar como legado el Plan Nacional de Búsqueda Verdad y Justicia”, una política pública permanente que va a “trascender a este Gobierno, que ha sido construida en conjunto con las agrupaciones de los detenidos desaparecidos y que espera contribuir a reparar en alguna medida el daño causado hace tanto tiempo, pero que sigue vigente”.

“Con los sueños de ayer vigentes, con la energía de hoy caliente, con la certeza de un mañana pujante, digamos una vez más con amor por los que aquí no están, con aprecio por quienes nos acompañan y dulzura por quienes nos sucederán: democracia hoy y siempre”, manifestó el mandatario chileno.