Desde hace cuatro días un incendio de campos de grandes proporciones tiene en vilo a los vecinos de la comunidad de Lago Posadas en el noroeste de la provincia de Santa Cruz, cuyo foco se inició en el valle del Río Oro, distante a treinta kilómetros de dicha localidad. Ya consumió cientos de hectáreas en un lugar paradisíaco.

Pero lo que más impacta y estremece es una imagen tomada en medio de la lucha desigual contra el fuego que avanza sobre vegetación seca: un bombero es trasladado a caballo por un baqueano que lleva un balde con agua para intentar detener el imparable avance de las llamas. Se trata del sargento primero de los bomberos Raúl Ojeda, al que se ve cuando en ancas de un caballo vadea el Río Oro trasladado por un baqueano del lugar. Es el único bombero de Lago Posadas y sus alrededores.

Lago Posadas es un pequeño poblado de 300 habitantes. Ubicado en el Departamento de Río Chico está a 175 kilómetros al sur de Perito Moreno y a 330 de Gobernador Gregores, las localidades más cercanas. Para llegar desde allí a la larga ruta 40 hay que hacer 73 kilómetros.

La ausencia de un cuerpo o cuartel efectivo de bomberos y de la falta de respuesta rápida del Consejo Agrario Provincial agravan la situación. Los propios vecinos con baldes de agua y distintos elementos combaten de manera desigual este incendio en uno de los paraísos que tiene la provincia de Santa Cruz y donde con el correr de las horas y los días tiende a agravarse. Y hay otro drama: por efecto del fuego los ojos de la gente se irritan y necesitan de colirios. Imposible conseguir: en Lago Posada no hay farmacia. Además el fuego tiene cercadas al menos a tres estancias.

Para agravar aún más la situación los brigadistas contra incendios forestales de Santa Cruz se negaron a ir hasta el lugar a dar batalla al siniestro. Hicieron una carta pidiendo disculpas a la comunidad del lugar pero dicen que “llevan cinco años sin cobrar lo que le habían prometido desde el Consejo Agrario Provincial (CAP, ente gubernamental del que dependen) y que ya han “llegado a un límite”.

“Visto los hechos que son de público conocimiento, con un incendio activo en cercanías de esa localidad (Lago Posadas), los brigadistas forestales de toda la provincia de Santa Cruz, queremos explicar la situación que vivimos desde hace ya más de 5 años”, dicen en el inicio de la nota.

“El motivo por el cual no hay brigadistas del CAP trabajando en el incendio es por la demora y en muchos casos el incumplimiento en el pago de viáticos, establecidos por ley 1956. Art 20 y reglamentado por el Boletín Oficial del 8 de septiembre del año 2020, siendo incumplidas por el CAP.

Como señalamos anteriormente esta situación no es de ahora, sino de muchos años anteriores, dinero que en muchos casos es para los voluntarios, gente que pone todo de sí para combatir incendios, sin mencionar que se deja familias, trabajo particulares que a todos y más en esta situación de pandemia ayudan a la economía del hogar y aunque no suene bien y sin dramatizar todos saben que salen, pero no saben si vuelven. Debido a la dificultad, y peligrosidad de los incendios forestales.

Basta de ninguneo, hoy quieren mandar al incendio a cualquiera con tal de quedar bien en la foto, pero es un trabajo técnico, no cualquiera puede hacerlo, porque cuando se cometen errores la gente se muere. Pedimos disculpas a la comunidad”, finalizan.

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