Las 1262 muertes que se registraron este martes no impidieron que el mandatario esgrima otro indignante comentario sobre el avance de la pandemia: “Es el destino de todo el mundo”.

Brasil registró este martes 1.262 muertes en las últimas 24 horas, su mayor cifra de fallecidos desde que comenzó la pandemia, y ya son 31.199 las personas que han perdido la vida a causa de la covid-19, una situación que el presidente Jair Bolsonaro lamentó escuetamente.

A la salida del Palacio de la Alvorada, donde Bolsonaro tiene por costumbre pararse frente a sus seguidores para dar apretones de manos y criticar a sus opositores, una partidiariaria le pidió unas palabras para las víctimas y respondió que la muerte “es el destino de todo el mundo”.

No es la primera vez que el mandatario de extrema derecha se muestra parco y distante en sus comentarios hacia las víctimas de la pandemia en el país que preside. Así, cuando Brasil superó las 2.500 muertes, aseguró que él no era “sepulturero”.

Hace algo más de un mes, cuando Brasil ya había registrado más de 5.000 muertes y, por tanto, superaba a China, Bolsonaro dijo que lamentaba lo que estaba sucediendo, pero se preguntaba qué podía hacer él.

Por otro lado, São Paulo, el estado con mayor número de casos (118.000) y muertes (7.994) volvió a registrar un nuevo récord en el incremento de positivos y fallecidos diarios, pocos días después de que se reabriera parte de su economía en algunos de sus municipios. Así, este martes se confirmaron 6.999 casos nuevos y 327 muertes adicionales.
La ocupación de las camas de cuidados intensivos también han experimentado un incremento con respecto a días anteriores, coincidiendo con una caída de hasta cuatro puntos porcentuales en los hábitos y en la aplicación de las medidas de cuarentena con motivo de la reapertura paulatina de la economía.

La tasa de ocupación subió en el estado hasta el 73,5 %, mientras que en la Región Metropolitana de São Paulo fue del 85,3 %.

Brasil es el segundo país en número de contagios (555.383 con los de este martes) y el cuarto en número de muertos, detrás de Estados Unidos, Reino Unido e Italia.

En los próximos días podría superar a Italia (33.530 muertos), que redujo significativamente la curva de fallecidos y contagios.

El récord anterior de decesos en 24 horas (1.188) databa del 21 de mayo.