Con edición de “Editorial El Mono Armado” y fotografía de tapa de Fabián Salamagnon y Sergio Italo Agliano.

Se llevará a cabo este domingo a las 17 en La Bodeguita del Medio, Castelli 1259, con acceso libre y gratuito.

Presentarán a la autora, los escritores Fabián Iriarte y Raúl Alonso y acompañarán el evento el músico Pablo Olmedo y el actor Enzo Cardinali.

Aly Corrado Mélin es nacida y reside en Mar del Plata. Creadora de la revista Arte y Palabras Marplatenses “Desnuca2”

Ha sido seleccionada en diversas antologías de Argentina, España y Republica Dominicana.

De su autoría: “En territorio anónimo”

“Sombrero de cardos”

“Buenas costumbres”

“Dicen que dicen”

Las mismas de contenido en poesía y dramaturgia.

En “Quejosos in de floter” se trata de cuentos. Volcados desde lo ficcional en un 2001 hasta 2015 en Argentina, donde los diferentes personajes y situaciones obtienen un hilo conductor sobre la ausencia de empatía con “el otro”.

Dice el escritor Fabián Iriarte en la contratapa del libro:

“Una empleada que debe aguantar la charla de una supuesta “amiga” que es una “cholula cool” ; un hombre que vive “de arriba” en la casa de su tía y descubre, a su pesar, la otra faz de su benefactora: Todos los discursos de los personajes de este libro, en primera persona, indican que son gente enojada. Cuentos, ´pensamientos, monólogos, conversaciones que dan cuenta una y otra vez, de episodios de confrontación. El motivo del enojo va revelándose de a poco; otras veces, de manera muy explícita; cuando el personaje, que ha ido aguantando su ira, ya no puede más y explota discursivamente.

Aly Corrado Mélin ha logrado, en una serie de viñetas, dramatizar la llamada “grieta” en la sociedad argentina, que no solamente va abriéndose, insidiosa, como una herida, en el trato diario con desconocidos, sino también divide relaciones de amistad y lazos familiares.

Los tonos varían, de lo ridículo a lo amargo, de lo cruel a lo humorístico pero lo que destaca en el estilo de los relatos es la oralidad: escuchamos a estos personajes como escuchamos, todos los días, a vecinos, parientes, la gente en la calle. La autora oye y anota fielmente el lenguaje cotidiano, con su mezcla característica de crudeza e ingenio”