El Ministerio de Trabajo dictó esta tarde la conciliación obligatoria por un período hábil de 15 días a partir de hoy en el conflicto que mantienen el Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU) y el Centro de Patrones y Oficiales Fluviales, de Pesca y de Cabotaje Marítimo con las empresas «en resguardo de la salud del personal y el estricto cumplimiento de la cuarentena».

El SOMU, que lidera Raúl Durdos, aseguró hoy que «el gremio no romperá la cuarentena impuesta por el gobierno», luego de que el viernes último ambos sindicatos adoptasen medidas para preservar «la salud de los trabajadores».

«Hay sectores que cuidan su capital a cualquier precio. El SOMU cuida el capital más preciado de los trabajadores, su salud, por lo que hará cumplir de forma estricta la cuarentena para defender la salud de todos”. había remarcado Durdos.

En nota dirigida a la cartera laboral y a su par de Transporte de forma previa a la imposición de la Ley 14.786 de conciliación obligatoria, los sindicatos subrayaron que “la medida gremial solo afectaría al 5 por ciento del comercio exterior».

«En un contexto de crisis sanitaria mundial y, si se tiene en cuenta que el promedio anual de buques que ingresan a puertos argentinos es de 4.800, el índice mensual es de 400 naves, lo que define matemáticamente que la afectación al comercio exterior de la medida es del 5 por ciento. A la crisis el país debe sumar otra socio-económica igual de difícil y severa», puntualizaron.

En la presentación ante Trabajo, los gremios sostuvieron que «la disponibilidad de la fuerza laboral está garantizada en todos los buques que, aún sin cumplir la cuarentena, traigan a los puertos nacionales mercaderías, insumos, materiales, combustibles y cualquier carga para luchar contra la pandemia y garantizar el funcionamiento de ciudades, actividades esenciales e industrias, entre otras».

También reclamaron a las autoridades la verificación y diagramación del ingreso de barcos a puertos nacionales, priorizando a los que están en espera y que hayan cumplido los 14 días requeridos de cuarentena para «no retrasar las exportaciones mientras esas naves ingresan, cargan y salen nuevamente».

La resolución ministerial fue adoptada por Gabriela Marcello, directora nacional de Relaciones y Regulaciones del Trabajo de la cartera de Claudio Moroni.

Las organizaciones sindicales habían decidido el viernes último «la no prestación de tareas para la toma de cabos y el ingreso de determinados buques en los puertos nacionales», lo que impediría su operatoria general.

Trabajo en especial consideró que la actividad desarrollada por los buques cuya operatoria podría ser afectada está exceptuada del decreto oficial de aislamiento social preventivo y obligatorio que debe cumplir la sociedad.

Ese personal es considerado «esencial» y, las tareas que cumple, constituyen una exigencia excepcional de la economía nacional», fundamentó Trabajo.

Además, sostuvo que en su momento se creó en la órbita de la Subsecretaría de Puertos, Vías Navegables y Marina Mercante el Comité de Crisis y Prevención del Covid 19 para el transporte fluvia, marítimo y lacustre, que integran los prestadores de servicios, cámaras empresarias, entidades sindicales y cualquier otra entidad o persona con incumbencia en el sector».

Télam